Capítulo 9: Casualidades

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La vida es un conjunto de casualidades, aunque no creo en ellas honestamente. Digamos que es muy caprichosa y es cuando quiere jugártela, te la juega.

Así fue que diciembre llego. Yo había ido a hacer unos trámites a Alicante, estaba sola porque mi pareja se encontraba trabajando. Sería un día muy largo ya que tenía que ir a dos lugares distintos, uno en la mañana y otro en la tarde así que tendría muchas horas muertas entre ambos.

Una vez que termine de hacer lo que tenía pendiente en la mañana, para no aburrirme me puse a dar vueltas por el centro de Alicante. Curiosamente había un fnac y decidí entrar para ver los nuevos gadget y echarle un ojo a las videos consolas, ya saben, suelen poner algunas en exposición para probar y me encantaba echarme un rato allí jugando.

Empiezo a dar vueltas mirando todo y llego a la zona de libros. Como una cría (algo que ya no soy) empiezo a buscar el libro de Dalas, el cual encontré en un estante. Fue un momento bastante curioso, por explicarlo de alguna manera. Cuando lo agarre sentí como si estuviera ahí conmigo.-si mis locuras-. Le eche un vistazo y luego lo volví a dejar en su lugar. No tenía un duro para poder comprarlo así que mejor ni me moleste en echarle un vistazo, porque seguramente me engancharía.

Seguí paseándome por toda la tienda y llegue a la zona de mi cometido, ahí estaba la Xbox one S, la mire como diciéndole – algún día te pillare- y acto seguido, me puse a jugar un rato con ella. Hacía años que no tocaba una video consola, pero sorprendentemente no se me daba nada mal.

Y allí estaba yo, jugando como una niña pequeña. La gente pasando a mí alrededor y yo enganchada. En una de esas siento a alguien detrás de mí, observando, pero como si nada seguí jugando, cuando de repente escucho:

-Oye no se te da nada mal-

Mi pecho pego un vuelco, me quede congelada, esa voz... Yo le conocía, la había escuchado mil veces. Me giro atónita y le miro. Esto definitivamente era una jugada extrema de las circunstancias, una casualidad de las que parecen ficción.

Si era él. Deje caer el mando de la Xbox.

-Dalas- Dije-

-Me miro y me dijo, si soy yo el mismo- Sonriendo-

Mi cara era un cuadro, sinceramente estaba en shock, tan solo salió de mi boca:

-Soy Sofia, no puedo creer que estés aquí frente a mí?-

-El me pregunta, Sofía?, la chica de internet, mi Sofía?-

-Y yo asentí con mi cabeza suavemente-

Nos quedamos un momento en silencio, mirándonos a los ojos atónitos, no lo podíamos creer. -Sabes esa sensación como que el mundo va a mil revoluciones a tu alrededor, donde te sientes solo frente a lo que te está pasando. Pues eso es lo que nos estaba sucediendo a ambos.-

Cuando volvimos a la realidad, le dije:

-No me puedo creer esta casualidad, la vida es una lianta heee.-

-La verdad que sí, pero extrañamente me siento muy feliz de la haya liado- me respondió- Pero es que no me piensas saludar?-

Yo sonreí y me acerque a darle dos besos. Al rozar su rostro me entro un escalofrió inexplicable. Y de la nada él me abrazo y yo por supuesto le correspondí sin pensarlo dos veces. Ufff en ese momento el tiempo se congelo, parecía que no nos queríamos separar, que éramos una sola persona en aquel lugar. Nos soltamos y le dije:

-Y ahora qué?-

-No se? Que haces aquí? Estas muy ocupada? No me habías dicho que vendrías a Alicante-

-Pues la verdad tengo que hacer tiempo para luego ir un lugar y después volver a casa. Y tú qué haces aquí?-

-Nada ya sabes por temas de trabajo y me estaba tomando un relajo para despejar la cabeza. Y ahora para no desperdiciar esta oportunidad vamos a tomar algo, invito yo -me dijo sonriendo y agarrándome del brazo sin darme tiempo en responder-

-Me puse a su lado y le dije: Pues amiguito mío, más te vale que pagues tú, porque has conocido a la persona con menos duros en este momento- le dije riéndome-

-A lo que me responde también riéndose: Eres igual en persona como en internet-Y nos fuimos de allí-

Yo le dije que si en vez de ir a algún sitio no le parecía mejor comprar un neste y unas patatas he irnos a sentar en una plaza cercana que había visto y le pereció una muy buena idea.

Y así fue. Nos dirigimos a la plaza, no sentamos en un banco. Nos echamos un buen rato hablando de todo. Esa tarde fue perfecta, fue como regresar a los días en que me juntaba con mis amigos a tomar mate en el parque. Pero como todo lo bueno tiene un final, él tenía que regresar a terminar sus asuntos y yo también. Así que para mantenernos más en contacto intercambiamos nuestros números de móvil y me dijo:

-Sinceramente, me alegro de esta loca casualidad, de verdad que me la he pasado genial, pero por favor no publiques mi móvil en las redes-

- Sonriendo le dije: Yo también lástima que el tiempo se hecho tan corto y no te preocupes solo en mi twitter lo pondré xD-

-En serio tía, lo que faltaría es que publicaras. Y sí se hizo corto pero espero que se repita!!!-

-Pero tu estas tonto? más vale que no lo publicare y por mi encantada en volver a juntarnos- Le dije aun sabiendo que era muy probable que jamás volviera a suceder-

Nos dimos un fuerte abrazo el cual de mi parte no quería que terminase nunca. Y así fue que nos separamos y seguimos nuestros caminos.

Todo me supo a poco, no sabía si era sueño o realidad, pero ya estando el tren que me llevaba a casa, recibo un mensaje:

-Ni yo me lo creo lo que pasó hoy J-

-Jajaja yo justamente estaba pensando lo mismo xD-

-Hasta mañana Sofi-

-Igualmente Da-

Llegue a casa, cansada y aun sin asimilar lo que había pasado.


Desatino (FanFic @DalasReview)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora