« Tsundere atrapado »

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Término del primer semestre, exámenes finales que se comenzaban a acercar, alumnos con hoja sueltas, cuadernos en manos o libros para intentar memorizar todo para la prueba final.
Mientras todos entraban en estado de estrés, habia un par que no, que a decir verdad se encontraba relajado y caminaba con tranquilidad por el jardín de la universidad. El viento comenzaba a soplar con fuerza haciendo que cierto muchacho de fleco partido sintiera escalofríos

- Shin-chan, ¿No crees que esta haciendo mucho frío? -

Llevó sus brazos hacia su pecho para cruzarlos y poder así frotar sus brazos para entrar en calor de esa forma.
El nombrado anteriormente mantenía su caminar lento y su semblante imperturbable, sin embargo no ignoro las acciones que comenzaba a realizar su acompañante con sus brazos, soltó un suave suspiro de sus labios y así quitarse el abrigó y dejarlo sobre la cabeza del contrario para protegerlo de aquel viento que soplaba

- Bakao, siempre eres muy descuidado, un día de estos terminaras seriamente enfermo y no seré yo quien cuide de ti. -

Llevo su diestra a la espalda ajena dandole un suave empujón para después arreglarse las gafas. Por otro lado un chico ojos grises bajaba la mirada un tanto avergonzado y aún más al sentir ese calor comenzando a subir hacía sus mejillas, movió su cabeza unos momentos y subio la mirada nuevamente.

- Entonces si llego a enfermar, ¿tu no cuidarias de mi?, shin chan~ -

Colocó en sus labios un mohín en lo que se quedo quieto esperando una respuesta. En seguida el susodicho se detuvo y volteo su cuerpo hacía su amigo frunciendo ligeramente el ceño

- ¿Es una broma Takao? -

Alzó una de sus cejas esperando que así fuera ya que de seguro la respuesta que daría sería algo vergonzosa en este momento

- No, no es ninguna broma. Así que responde Midorima Shintaro, si yo enfermo gravemente ..¿Cuidarías de mi? -

Lentamente subió sus manos a los hombros contrarios haciendo su mirada un tanto más intensa y ansiosa de obtener una respuesta que confirmará lo que el creía

- ¿Que clase de pregunta es esa?, es obvia su repuesta. Yo... Yo si cuidaría de ti, no podría dejar que algo te sucediera. -

Desvío unos momentos su vista apretando un poco los dientes,no podía creer lo que acababa de decir, de alguna u otra forma se confesó ante su ex compañero de Shutoku

- Shin-chan puede ser muy tierno si así lo quiere -

Sonreía ampliamente el ojo de águila, tomo el rostro del más alto haciendo que nuevamente le mirará, se acercó a este para depositar un beso en su nariz

- Callate, bakao. -

apartó esas manos de su rostro tomándolas con fuerza y bajándolas, esta vez él se acercó y depósito un beso, un beso suave y casto en esos labios sonrientes.
Aquella acción realmente sorprendió al pelinegro haciendo que tambien esbozará una ligera sonrisa.
El aura de halcón soltó una de las manos que aún sostenía para así voltearse y jalar a su acompañante a volver a caminar, esta vez de verdad no podía verle, se sentía realmente avergonzado, había confesado sus sentimientos hacia Takao, sin palabras necesariamente ,pero ese beso decía más de lo necesario.

- Shin-chan, ... -

- No digas nada, Bakao. -

Un ligero ceño fruncido apareció pero también una tímida sonrisa aparecía.

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