La historia de amor de Lily Vulturi

¿Haciendo las paces?

¿Estás bien? -Pregunté en la entrada de su cuarto, desde la sala, la había escuchado sollozar, ¿por que mi bella Lily estaba de esa manera? ¿ podría haber algo que pudiera hacer por ella?, me acerqué hasta su cama y le levanté el rostro, sus ojos me miraban tristes lo cual fue un golpe muy duro en mi muerto corazón-¿Que te ocurre?-Tuve un sueño muy lindo...-Si así fuera estarías feliz, no llorando.-Es que era tan real, de enserio creí que estaba pasando...-dijo colocando su cabeza en mi pecho, yo la abracé despacio para no lastimarla- -¿Y que soñabas?-Que la persona quien me gusta, me correspondía -Sentí mi mundo caer, ¿ella ya estaba enamorada de alguien?, ese pensamiento me recorrió por el cuello como miles de dagas, sabía que no debía hacerme ilusiones con ella, lo sabía, ¿como fui tan estúpido en pensar que me correspondería?. La solté algo brusco, no podía evitarlo, el dolor, la rabia los celos se apoderaron de mi.-Es una pena. -contesté frío- será mejor que comas algo, ¿o esperarás hasta cazar?-No, iré ahora...-Se levantó y con paso lento y desganado se metió a la cocina, yo me fui al jardín pues no aguantaba el olor a la comida humana.Media hora mas tarde ella salió-Alec, se que vinimos por la misión pero...me gustaría salir a dar un paseo -fijé mis ojos en ella, quien miraba nerviosa a otro lado, ¿a caso pensaba que le diría que no?, suspiré resignado, aunque ella ame a otro no quita que yo la deje de amar, si ella es feliz con eso bueno, también tendré que serlo yo.-Ve a cambiarte, te llevaré a dar un paseo -ella me miró incrédula, realmente no esperaba esa respuesta por mi parte- o ¿prefieres ir sola?-¡No!....quiero decir...en media hora estoy lista -dijo entrando atropelladamente a su recamara-Y como dijo en media hora salió de su cuarto, yo me quedé paralizado, estaba mas que hermosa, su cabello rojo estaba atado a una media cola con un listón celeste, llevaba una remera de mangas cortas, una pollera tableada negra que le llegaba un poco sobre los muslos y zapatillas blancas. Sus preciosos ojos estaban delineados y sus labios tenían algo de brillo color rojo.Suspiré se veía preciosa.-¿Me veo bien? -preguntó girándose y haciendo poses medias raras--Si, te ves fabulosa.-¡Oh! recibí un alago de tu parte! soy una chica muy afortunada -dijo riéndose. Mi bella Lily había vuelto a ser la de siempre.Salimos y agradezco que esté nublado, íbamos caminando a paso humano recorriendo tiendas, tiendas y mas tiendas. Decir que compró una cuarta parte de cada una es decir poco. Como se que ella no iba a poder con todas sus cosas cargué la mayoría de ellas hasta volver a casa.-¿Algo mas que quieras comprar? -No, pero me gustaría salir a la noche, Alice me dijo que las fiestas en Río son geniales.-De acuerdo. -Ella me sonrió, cuanto amo su bella sonrisa, ojalá pudiera hacer que solo sonriera así para mi. Pero el recuerdo de la conversación de esta mañana me hizo volver a la tierra ella nunca sería mía y eso es algo que dolía con el alma.Mis facciones se endurecieron y me encaminé al jardín, me senté en el pasto y ella junto a mi.-¿Por que eres así? -me preguntó- un día eres alguien muy lindo y caballeroso y al rato eres de nuevo el frío Alec Vulturi...se que llevamos siglos conociéndonos y que no te gusta abrirte a las personas, pero me gustaría ver mas tu lado verdadero y no la mascarita de niño malo. -yo la miré fijamente pero ella no lo hacía, solo se limitaba a jugar con el pasto.-¿Mascarita de niño malo? -sin poder evitarlo solté una carcajada, era tan adorable, la atraje hasta mi y la abracé aun riéndome- de acuerdo, trataré de ser mas..."yo" si eso es lo que te hace feliz.-Gracias Alec -dijo escondiendo su rostro en mi pecho-