¿Quién quiere asesinar al rey?

Mi padre siempre me contaba esta historia los días que me veía triste y decaído. Me decía una y otra vez 《hijo todo en la vida está cuesta arriba hasta que un rey llama a tu puerta》. Esta noche al encontrarme en un estado de ánimo similar al que tenía cuando mi padre me contaba esta historia, me ha venido a la mente. Sé que mi padre me contaba esta anécdota suya con la mejor de las intenciones. No obstante, no conseguía quitarme mi pésimo estado de ánimo. Sin más demora procedo a contaros su historia.

Corría el año 1905 y el rey de España Alfonso XIII visitaba una bonita ciudad de la Mancha, que más parecía un pueblo grande que una ciudad pequeña. El nombre de la ciudad a la que me estoy refiriendo es Albacete. Allí vivía mi padre en su viejo y polvoriento apartamento situado en un mugriento y pestilento barrio a las afueras de la localidad. Mi padre dormía plácidamente en su cama tapado con una gruesa manta que, en teoría, debería ser blanca. Cerca de su cama y tiradas por el suelo había varias botellas de alcohol vacías de las que, de vez en cuando, caían gotas del líquido que antes contenían y que iban a parar a la raída alfombra de la habitación haciendo que esta despidiese un fuerte olor a alcohol. Mi padre soñaba sin percatarse en un principio de que alguien llamaba a su puerta. Más tarde los ladridos de su viejo y huesudo galgo le hicieron despertar algo ido. Tambaleándose, caminó por el estrecho pasillo que llevaba hacia la entrada en el que de las paredes comenzaban a caerse mohosos trozos de pintura blanca y que llenaban el suelo haciendo parecer que éste estaba lleno de nieve. Adormilado, abrió la puerta y para su sorpresa encontró a un individuo ataviado con lujosas ropas aterciopeladas de un bello azul marino. En la calle, parado junto a la acera de su apartamento, había un majestuoso carruaje que mi padre intuyó que era de alguien muy poderoso. El individuo al que le había abierto comenzó a hablarle, no sin antes carraspear para aclararse la voz.

- ¿Es usted Enry Macguayer?

- Es Henry Macwaller. Pero prosiga buen hombre - le corrigió mi padre mientras hacía un esfuerzo terrible por decir lo más clara posible esa frase, pues aún le duraba la borrachera de la noche anterior.

- Vengo en nombre de su majestad el rey Alfonso XIII. Esta mañana a las nueve en punto, mientras su majestad paseaba por las bonitas calles de la ciudad honrando con su presencia a los ciudadanos y les...- del carruaje salió una voz adormilado que dijo 《 vaya al grano Tomás, no tenemos todo el dia》.Entonces Tomás volvió a carraspear y hablando muy rápido prosiguió. - Un varón disparó contra el rey errando en su objetivo y alcanzando a uno de los jinetes que acompañaba al carruaje real, matándole en el acto. En el lugar donde el agresor había efectuado el disparo se encontró una nota en la que decía que pretendía atentar contra la vida del rey. Ciudadanos de Albacete nos han recomendado a usted para que dé con éste infame. Sepa que de ser así será recompensado con una gran suma de dinero además de la gratitud del pueblo español y de, por supuesto, su majestad.

- Bien, ¿dónde está esa nota? - dijo mi padre mientras se frotaba las manos.

- Al no encontrar nada de gran importancia en ella la tiramos - contestó Tomas.

- Primero. No deberíais deshaceros tan rápidamente de una prueba, por pequeña que sea. Son los pequeños detalles los que resuelven grandes misterios. Zlegundo... Ejem. Perdón, segundo. Usted me ha dicho que el sospechoso pretendía atentar contra la vida del rey. Eso quiere decir que lo iba a hacer en un futuro. Por lo tanto no hubiera tenido sentido que lo hubiera asesinado esta mañana ya que entonces no tendría que haber aparecido ninguna nota. De modo que el individuo no falló su disparo si no que su objetivo era el pobre desgraciado al que disparó. Supongo que lo haría como método para infundir terror.

- Excelente reflexión señor Macwaller - dijo el rey mientras salía del interior del carruaje y miraba con ojos desconfiados ambos lados de la calle temiendo que de alguna esquina saliese un hombre y le disparara a quemarropa.