Era un día como cualquier otro, pero con la diferencia de que ella despertó con un pensamiento más exótico, más abierto, con ganas de dejar la rutina a un lado y construir una nueva vida, ya no quería estas más bajo el ala de su padrastro. Sentía estar atrapada en el cuento de hadas “La Bella y La Bestia”, el castillo era el apartamento y su bestia, su padrastro; la deuda a saldar hoy era reemplazada por la necesidad material. Ella pensó todo el día en eso, inclusive cuando habló con su novio, hablaron como de costumbre y ella le comentó su pensamiento. Debido a la distancia él le propuso un trato, ella tenía que buscar la manera de salir de su casa en una o dos semanas mientras él pensaba como llevársela muy lejos.
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La Bella Y La Bestia
Короткий рассказA veces los cuentos de hadas se convierten en realidad. Pero sin el "y vivieron felices para siempre"
