Si me preguntan si te quiero... mentiré (RW & HG)

¿Pesadilla yo...? ¡Pesadilla él!

"Es leviosa, no leviosá... esa chica es una pesadilla enserio, no me extraña que no tenga amigos..."

Esas palabras resonaban en mi cabeza una y otra vez. Pocas veces algo me había humillado tanto como ese cabeza hueca, y encima a mis espaldas, el muy cobarde se burla de mí con sus amiguitos y ni siquiera lo hace de frente. No sé quien rayos se cree ese estúpido de Ronald Weasley. Encima que le pretendo ayudar en un intento nulo de cambiar a un negado en un mago de valía.... No entiendo ni porqué me afecta tanto, debería ignorar a ese pelirrojo absurdo e incluso a su amiguito Potter, se ve que ambos deben ser igualitos...

Rrrggg... ¡Qué hambre! El sonido de mis tripas resonaba por todo el baño. No debí saltarme la cena, y mucho menos para venir a llorar a los baños. La verdad es que ahora me siento como una boba. Llorar por Potter y Weasley... ¡qué estupidez! Aunque a pesar de ello no he dudado en soltar un mar de lagrimas nada más oír sus palabras... ¡pero nunca más! Se atrevió a llamarme pesadilla... ¿a mí? ¡Y él qué! Todo el día pegado a Harry Potter como si fuera su siamés, no sabe hacer ni un solo truco bien hecho, come... bueno que digo come, ¡engulle como un pato! Y encima es de lo más desagradable. Y tiene el atrevimiento de llamarme a mi pesadilla.

Pero debo olvidar este horrible momento y salir a comer algo. Será mejor que me sequé las lágrimas, prefiero evitar que esos dos sepan que estuve llorando por su culpa.

Abrí la puerta del baño y al salir vi una enorme sombra reflejada en el suelo. Levanté la vista para ver que podía haber tan grande en el baño para producir esa sombra y... ¡un troll!!!! Para mi horror, no se como, ese monstruo había entrado en el baño de chicas y no parecía tener cara de muchos amigos. El cerebro se me paralizó y no sabía como saldría de aquella situación....

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No podía creerlo, hace solo unas horas creía que lo peor que me podía pasar aquel día era que Ronald Weasley y sus amigos se burlaran de mí, y ahora estoy aquí tirada en mí cama después de haber sido atacada por un enorme troll. Menos mal que Harry y Ron estaban allí. Son un poco pesados (sobre todo el pelirrojo) y me sacan a veces de quicio, pero sin duda se han portado como verdaderos amigos viniendo a rescatarme. Si, amigos, al final resultará que esos dos se convertirían en mis grandes amigos....