Estaba esperando lo peor, ya Claudia había leído el mensaje, solo era cuestiones de tiempo para que me mandara a chingada, no podía mantenerme quieto en un solo lugar, sentía que iba a vomitar.
"Ok cálmate, ya lo vio y no a escrito nada, tal ves está pensando que también eso siente por mi, o está pensando como decirme que me valla a la mierda de una buena forma" pensaba, claro que no me ayudó mucho mi pensamiento que digamos.
-¡Hijo, baja a cenar!- escuche gritar a mi madre.
-¡Bajo en dos segundos!- le grite desde mi cuarto sin dejar de ver la pantalla de celular, en la que estaba la conversación entre la osa mayor y yo, (así le digo yo a Claudia) con el mensaje en visto, todavía.
Baje las escaleras, trayendo el celular en la mano, mi madre al verme bajar con el celular me dijo,
-Deja esa cosa del diablo en el buró, no quiero que estés metido en el toda la Santa cena.- me dijo con un tono fresa.
-Pero mamá...- me interrumpió - Sin peros por qué si no te meto un chinnngadaso.-
-Esta bien, está bien, no debemos usar la violencia.-le dije mientras que subía el tono al máximo, para luego dejarlo en el buró.
Ya casi acabamos de cenar, y no avía escuchado nada. Ya acabando de comer, recogí mis platos, y fui corriendo a ver si había llegado algo, pero nada.
Empecé a imaginar que está a ella pensando, hasta que deduje que ella quería hablar, le mande un mensaje diciendo "Disculpa, ¿Quisieras hablar?" Luego luego me contesto con un mensaje diciendo "si"
Ese mensaje me tranquilizo al 100. Me acosté en mi cama y me dormí.
