Debutar es lo que todo aspirante a músico quiere.
Pero cuando Kang Haneul se entera de que ha pasado la prueba para estar en una banda, lo que menos se espera es que el grupo esté integrado por 7 chicos.
¿Te imaginas los cambios que supondrá es...
JeongGuk parecía haber decidido ponerle las cosas difíciles a TaeHyung ya que no se separó de mí ni un solo segundo. Me gustaba estar a su lado, era muy divertido y había extrañado su compañía, pero sabía que su comportamiento le traería consecuencias respecto a la amistad que le unía a Sunbae. Ellos habían sido compañeros de banda por varios años y no me hacía gracia interponerme entre los dos, aquella situación en verdad era culpa mía, si quizás hubiera conseguido apartarme de TaeHyung al principio pero ahora ya no podía, no era solo él el que me iba a encontrar sino que yo quería verlo, lo necesitaba para sentirme tranquila y no sabía por qué.
¿Había caído ya por los encantos de Sunbae?
Esperaba que no porque aquello haría que las cosas se pusieran más complicadas de lo que estaban.
***
- ¿Estás bien?
Levanté la cabeza y vi a Joowon Oppa apoyándose en los talones para quedarse a mi altura ya que yo estaba sentada en el suelo de la azotea. Había ido allí para despejarme y estar sola, las miradas de TaeHyung hacían que un cosquilleo recorriera mi cuerpo y no lograba comportarme como alguien normal o seguir los pasos de la coreografía.
- Perfectamente - susurré intentando sonreír.
Él se sentó a mi lado contra la pared y miró al cielo lleno de estrellas, se había hecho de noche y seguíamos practicando para la presentación del nuevo miembro, osea, yo. La compañía quería hacer algo así como una fiesta con la prensa y algunas fans para "integrarme" en la industria y para que se me viera ya como un miembro al completo de la banda.
- ¿Sabes? Me preguntaba si tú querías que saliéramos a dar una vuelta por el centro antes de la presentación, así estarías menos nerviosa.
Yo miré a Joowon y él solo sonrió haciendo que yo me pusiera roja, por alguna razón su sonrisa me parecía muy íntima y cada vez que me sonreía, mi corazón se movía nervioso y mis mejillas no podían evitar revelar como me sentía.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¿Salir con él los dos solos? No sabía si estaba preparada, si me ponía nerviosa estando así con él no sabía que pasaría si estuviéramos solos una tarde. Pero, lejos de hacer uso de razón, asentí rodeándome las piernas con los brazos y volviendo a mirar al cielo. Oí la risa de Joowon y no pude evitar unirme hasta que la puerta de la azotea se abrió y apareció TaeHyung al otro lado. Puse los ojos en blanco y vi como Joowon se levantaba y me ofrecía la mano para después levantarme también. Pasé de Sunbae y entré cuando sentí como su mano había agarrado la mía reteniéndome a su lado. Joowon vio eso y se despidió con la mano dejándonos solos, algo que yo había estado evitando alejándome de Sunbae aunque siempre me encontraba mirándolo sin darme cuenta.
- ¿Hasta cuándo piensas evitarme? - preguntó y, al no oír mi respuesta, de un momento a otro me rodeó por detrás con sus brazos haciendo que mi corazón respondiera a su acción. Sentí su aliento en mi cuello y mis rodillas empezaron a temblar como si estuvieran hechas de gelatina -. ¿Hasta cuándo piensas huir de lo que sientes?
- Yo...Yo no sient-nto nada - dije intentando sonar tranquila pero consiguiendo todo lo contrario.
- Ah, ¿sí? - preguntó con un tono irónico y sentí como apoyaba sus manos en mis hombros y me daba la vuelta haciendo que estuviéramos frente a frente -. ¿No sientes nada, Haneul? - volvió a preguntar mientras posaba una de sus manos en mi espalda y me atraía hacia él y con la otra me rodeaba el cuello para empujar mi cabeza hasta que nuestras narices se rozaron -. ¿Sigues sin sentir nada?
- S-S-Sí - susurré.
Lo siguiente fue sentir como sus labios dejaban su rastro en mi cuello mientras yo me agarraba a sus brazos sin poder pedirle que parara, las palabras no me salían y tampoco quería decirlas, me sentía como en una nube estando cerca de TaeHyung así. Hasta que sus labios besaron la comisura de los míos, ahí sentí que mi cerebro ya no estaba conectado con mi cuerpo.
- Noto como estás temblando, nena - susurró contra mis labios -. ¿Sigues diciendo que no sientes nada, Haneul? Deja de mentirte, no podemos forzar los sentimientos ni mucho menos negarlos.
- ¿Qu-Qué es lo qu-que estás tratando de decir? - conseguí preguntar a pesar de que no estaba pensando con claridad.
Él rozó su boca con la mía pero no me besó algo que me decepcionó pero, sin pensarlo, lo atraje hasta mí para unir nuestros labios, ya no podía aguantar más. Sus labios al principio trataron a los míos con delicadeza pero después las cosas se descontrolaron, nuestras manos exploraban al otro hasta que mi espalda tocó la pared y me vi elevada hasta que rodeé su cadera con mis pernas. Su manos se apoyaron en la pared mientras mis brazos estaban rodeando su cuello para no desestabilizarme y caer. Su camiseta voló por encima de su cabeza y sin poder evitarlo me encontré besando su estómago hasta que subí a su cuello mientras los músculos se contarían a mi paso. Saber que él reaccionaba así por mí hizo que me sintiera morir, nadie me había hecho sentir así tampoco y por un lado tenía miedo pero por otro me gustaban esas sensaciones, me sentía...viva.
- Quiero que seas solo mía - susurró TaeHyung en mi oído calentándome aún más la sangre.
Mis ojos se encontraron con los suyos y nos miramos unos segundos mientras nuestras respiraciones agitadas eran lo único que llenaba el silencio en la azotea. Me apoyó más contra la pared y sus manos se instalaron entonces en mi cara para después acariciar mis mejillas.
- Quiero que seas mía - repitió.
Besó mis labios con dulzura y me abrazó acariciando mi cabello. Apoyé la cabeza en su hombro sintiéndome en casa. En ese momento me quise dar una lección a mí misma, la verdad era que Kim TaeHyung me había gustado desde el primer momento. Siempre me había parecido muy misterioso y me había encontrado queriendo saber sobre él, recordaba la primera vez que nuestros ojos se habían encontrado, había caído por él entonces. En verdad había caído por él muy hondo y hasta ahora estaba colgada por TaeHyung de una forma en la que ni siquiera sabía como estar alejada de él.
- Lo soy - dije segura y noté su sonrisa en mi cuello.