Un peón en el destino
Usted, reina de mis deseos prohibidosAmbos sonreiremos y en el beso a lo largo del silencio sonaron nuestra bocas y uniendo los labios sentiremos la pasión propia del amor
Recorriendo nuestras pasiones
En tiempos del ayer, usted dueña de lo prohibido, mi amante del placerSobre el suspiro del aire en cielos oscuros, otoño sobre sus ojos color primavera, extraño su sonrisa, aquella la más sincera, la amo tanto con el sabor de sus "buenos días" cada mañana