Osadía.

17 5 1
                                    


Era un día caluroso en la ciudad Parga, y con un día así me era inevitable no ir a las playas azules que hay en mi país. 

Tomé mi bolso y caminé ya que sólo eran unas 20 cuadras y convengamos que amaba caminar, se había vuelto una de mis cosas favoritas ya que siempre me trasladaba en auto.

Al llegar, me senté en una piedra que parecía bastante cómoda y descansé ahí pensando en todo..

Aunque en mi ciudad solamente habitaban unas 3000 personas le había tomado cariño, las tardes interminables que pasaba en la playa eran recuerdos que jamás borraría de mi mente y fuera de que me había acostumbrado a estar sola era uno de mis pasatiempos favoritos. 

Se podría decir que la soledad y yo nos habíamos hecho grandes amigas, yo no conocía de salir a bailar, ni estar con chicos, ni relacionarme, ni alcohol ni cigarrillos.  No, yo tuve una adolescencia-infancia muy 'anormal', yo conocía de clases de taekwondo, y muchas más maneras de protegerme por que claro ese era el lema de mi madre ''Vos estás adelante de todo, tenes que saber cuidarte antes que nada''. 

Pero bueno, dejemos de hablar de mi y hablemos de mi entorno, que consistía en dos personas: mi mamá y mi papá. 

Si comenzamos por mi mamá ella se llama Cristina, es una mujer bastante esbelta, rubia y de 40 años que había pasado toda su vida, o al menos gran parte de ella cuidandonos, al igual que mi papá, claro está.

Para ser sincera, con mi papá que su nombre es Raul no tenía la misma relación que con mi mamá, sentía como una cierta distancia entre los dos, toda mi vida lo sentí algo...ausente, pero espero que sólo sean sensaciones. 

En realidad, yo me había alejado un poco de los dos, cuando ellos me 'cortaron las alas' y un poco lo veía bien y un poco lo veía mal. 

Hasta el día de hoy que todavía no termino de comprender cuál era el motivo que tenía el hombre que me buscaba, y ellos no querían explicármelo. 

Mientras vagaba en mis pensamientos mirando las olas rompiendo y las gaviotas blancas en busca de algo que comer, una señora en frente mio de unos 55 años se me quedó mirando como si estuviera viendo a la mismísima parca.

-¿Señora, está bien?- Pregunté.

-Ehh- Dijo y se le cayó el termo con mate de las manos. -Vos..vos.- Le temblaban las manos.

-Déjeme que la ayudo- Me levanté 

- ¿Carolina?- Me dijo.

-¿Qué?-Fruncí las cejas. -Nono , yo soy Jade-

-No, vos sos Carolina, nunca olvidaría esos ojos, te tengo que llevar con tu papá.- Me tomó del brazo.

Mis instintos de protección estaban en alerta roja, me safé de su agarre.


-No me toque- Dije.

-Espera Carolina, tenés que escuchar- Se me acercó.

No esperé más y saqué el arma que tenía escondido en la espalda baja.  La señora ahogó un grito.

-No quiero lastimarte- Me dijo levantando las manos

-Entonces no me vuelva a tocar- Le apuntaba en la cabeza con el arma mientras mi respiración se agitaba.

-No, pero tenés que escucharme, necesito que sepas algo, no puedo creer que estés acá, tan grande..- Se le cristalizaron los ojos.

-No se quien és usted- Guardé el arma.

-Ya va a haber tiempo para saber eso, ¿por qué tenés un arma cielo?- Me dijo amable.

-Mis padres me hacen llevar una todo el tiempo, y estoy bien preparada, así que si va a lastimarme es mejor que siga su camino.- 

-A veces el enemigo está más cerca de lo que te imaginas Caro..- 

-Me llamo Jade y no entiendo a qué se refiere.- Me di la vuelta.

-Bueno, Jade.. Perdón,tomá.- Me dió una carta.

Conocía ese truco, había algunas sustancias que al tacto te desmayabas.

-No voy a agarrar eso, no lo quiero.- Respondí.

-Leyendo esto vas a responder cada una de tus dudas, te lo aseguro..-

-¿Cómo sabe que tengo dudas?- 

-Por que te conozco más de lo que te imaginas..- Me miró.

-No, usted no me conoce nada.- Me di la vuelta dándole la espalda y siguiendo mi camino.

-Sé que no estás muerta como tus padres hicieron creer a todos en Argentina.-

Me paré en seco



Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 11, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Jade.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora