Todo empezó un martes 1 de abril del 2008 cuando me dijeron que mi madre estaba embarazada. Yo super emocionada por tener un hermanito, empecé a preparar una caja y a meter peluches para cuando naciera.
No me lo creía, era una noticia increíble. Mi padre siempre se negaba a aguantar a otro bichejo como yo, pero en verdad sé, que se moría de ganas, tampoco soy tan mala.