23. Necesito tu ayuda

99 4 1
                                    

Capitulo 23.

El imbécil de ojos negros.

............

Max.

Una semana horrible de examenes tediosos y visitas de personas que la verdad ni me acuerdo quienes son, alfin a terminado.

Podre regesar al colegio, estoy demasiado atrasada a comparación que los demás, pero tengo a mis amigos que me pueden ayudar.

Leyla a estado viniendo todos los días a verme, poniendome al día con lo que ha pasado en estos ultimos meses.

-señorita Jones, pase por favor- la directora Helena me llama desde su oficina, me levanto de mi comodo asiento en el que me pase como volando y entro

-directora- dije haciendo un asentimiento de cabeza y ella señalá que me siente

-muy bien- pusó sus manos frente al escritorio- me alegra tenerla de regreso señorita, un mal momento el que nos hizo pasar eh?- sonrió, a lo cual solo pude alzar una ceja extrañada- reponerse en sus clases le va ser duro, pero aqui estoy yo para ayudarle a que se reponga y se gradue- rebusco unos papeles en su cajón derecho y me miro denuevo- tengo aqui las solicitudes de los maestros para que se las entregue y le den trabajos extras y ayuden con sus notas- dijo tendiendolas frente mio

-gracias directora- tome las hojas

-y tambien le asignare un tutor, bueno- movió sus dedos golpeando la mesa- uno de los que considero mis mejores estudiantes- dijo tomando el microfono que tenia a su lado izquierdo y lo encendio, lo golpeteó dos veces y habló- por favor el estudiante Lars Hoffman, acercarse a la dirección.

Escuchar ese nombre me causaba ganas de tenerlo en frente y golpearlo y....momento ¿que dijo? ¿el será mi tutor, él?

-¡¿que?!- grite levantandome de mi silla y poniendo mis manos en el escritorio asustando a la directora quien se hizo hacia atras

-¿que... que le sucede?- preguntó

-hay no puedo creerlo, entre tantos estudiantes justo él- hable mirando al techo y alzando mis manos- tú me odias- me sente resignada mientras la directora seguia mirandome

La puerta sonó con tres toques en sincronia y un grito de la señora loca, dio el paso

-me alegra que haya llegado, la señorita estaba extraña y...- se quedó en silencio mientras yo cruzaba mis brazos y fruncia mi ceño maldiciendo internamente mi mala suerte

-la conozco está un poco... loca- lo último lo dijo en susurro a lo que regrese a verlo como cual exorcista

Estaba parado atras de mi con su estupida sonrisa caracteristica y mirando a la directora.

-bien, ¿para que soy bueno?- preguntó

-para tres cosas- dije mirandolo - para nada, para nada y para nada- dije pero no me miro, su vista seguia distraida en toda la oficina y como si no estuviera ahi, me ignoro

-le he asignado un tutor a la señorita- me señaló, yo solo bufe y cruze los brazos- y quien mejor que el mejor- dijo muy contenta mirandolo y él solo sonreia - es mi mejor opción-

-me encantaria pero no creo que pueda enseñarle lo que ella necesita- dijo sentandose en la silla de alado - ademas no tengo mucho tiempo

-oh, de eso no se preocupe, yo le dare las guias y todo sera mas facil- dijo la directora

-bueno....

-me alegro de que este deacuerdo- dijo rapidamente cortandolo en lo que iba a decir - ya pueden irse chicos, sera mejor que inicien desde hoy- dijo abriendo la puerta para que salieramos- oh, y tendra que entregarme un reporte de como van en los estudios, es semanalmente- finalizó cerrando la puerta rapidamente dejandonos fuera

El Imbécil De Ojos NegrosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora