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Habían pasado casi dos semanas desde que Mattias escribió en la penúltima hoja de aquel diario.

Llegaba de su trabajo y tomaba el diario entre sus manos, junto con aquel bolígrafo de tinta negra; no sabía que hacer, justo cuando iba a comenzar a escribir sus ojos se llenaban de lágrimas y terminaba por dejar el diario en el cajón donde siempre lo guardaba.

Mattias salió de su trabajo -un poco más temprano de lo habitual - llegó a su casa y encontró una nota de Soraya avisando que llevaría a los niños a dar un paseo aprovechando su día de descanso.

Subió a su cuarto y se recostó en la cama, su mirada se posó en un portarretratos que se encontraba en un pequeño buró; aquel que contenía una foto de él y Jhonny, la misma que fue tomada el día de su unión civil.

Sonrió al recordar aquel día, el que fue el día más feliz de su vida. Recordó todo lo que vivió durante su noviazgo con Jhonny, los viajes, las noches llenas de amor que tenían, cuando él trataba de enseñarlo a bailar, sus ojos se llenaban de lágrimas con cada uno de los recuerdos.

Me haces tanta falta Jhonny, te extraño demasiado.— susurró mientras pasaba las yemas de sus dedos sobre aquella fotografía.

—Yo también lo extraño, aunque casi no lo diga.— levantó su mirada y se encontró a Soraya apoyada en el marco de la puerta. — Perdón si interrumpí, la puerta estaba abierta.

Mattias se restregó los ojos con sus manos, para quitar algunas lágrimas que bajaban por su rostro.

—No te preocupes.— tenía la voz un poco entrecortada, debido a que pasó un buen tiempo llorando.— Pasa, Y ¿Cómo les fue en el paseo?.

Entró y tomó asiento en la cama, a un lado de él.

—Muy bien, ya me hacía falta pasar tiempo con los niños. Por cierto, Matthew te está esperando abajo.

—Oh cierto, había olvidado que iba a venir. Gracias por avisarme, ¿Le podrías decir que enseguida bajo, por favor?.

Ella asintió y se retiró de la habitación.

El rubio tomó el diario que se encontraba en el buró, junto con la fotografía que se encontraba en aquel portarretrato y buscó en el cajón hasta encontrar un poco de cinta adhesiva.

Dejó escapar un suspiro y tomó un poco de aire antes de salir de la habitación. Matthew lo esperaba en la sala, lo saludó con un corto beso en sus labios.

—Cariño, ¿Estás seguro de lo que quieres hacer?.— Mattias lo abrazó y susurró un si en su oído.

Se tomaron de la mano y caminaron para abordar la camioneta de Matthew y dirigirse a su destino, el cementerio.






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Esto ya casi termina, más tarde subiré la segunda y última parte.

Las ama

Jade 💛 😞

I miss you [Breezango]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora