Sin ellos no veo (JaimexEdgar)

La venganza es dulce

Poco a poco los ojos del barbón se abrieron revelando frente a él un programa de televisión que no lograba reconocer.

"¿Qué wea?" pensó mientras se apoyaba sus brazos para levantarse. Fue ahí cuando se dio cuenta donde estaba acostado. Estaba durmiendo nada más ni nada menos que sobre Eddiesick

¿En que momento había pasado? El más bajo trato de recapitular todo lo ocurrido.

Había llegado después de almuerzo a ver a su amigo. Se pusieron de acuerdo para ver el capítulo de una serie que Jaime quería. Con unos cuantos snack se acomodaron en el sofá y prendieron la televisión. Y de ahí los recuerdos se vuelven difusos.

Alfredonx recuerda haber visto la mitad del programa cuando ambos se recostaron en el sillón. Este se tiro sobre Edgar para que cupiesen mejor ya que ambos eran muy grandes para estar cómodos sin topar uno con el otro. Luego de eso Jaime recuerda que su pololo le comenzó a acariciar la espalda y... Bueno ahora todo cobraba sentido para él.

Estaba molesto por haberse perdido el capítulo, tanto que lo había esperado y por un simple regaloneo no pudo terminar de verlo.

Con cuidado, se acomodó para quedar cara a cara con el responsable, que como era de esperarse, dormía plácidamente sin enterarse de que el otro lo miraba enojado.

Jaime quería despertarlo y retarlo, pero no podía, Edgar tenía una expresión tan tierna con sus mejillas coloradas, sus cabellos desordenados, la boca abierta con un poco de saliva en la comisura del labio y sus lentes chuecos en el rostro que hacía que el barbón se lo pensara antes de hacer cualquier movimiento.

El último detalle le llamaba la atención particularmente. Con sumo cuidado saco los lentes ópticos y los sostuvo entre sus dedos.

"¿Cuánto tiempo lleva con ellos?" se preguntó el más bajo. El recuerda perfectamente que antes, cuando recién se conocieron, el de rulos no los usaba, fue con el tiempo que su vista empeoro, pero levemente, por eso le habían recomendado lentes de descanso por lo que Jaime recordaba y que estos debía usarlos para leer o estar frente a la pantalla del computador, aun así no los ocupaba, tuvo que empezar a ver completamente borroso para ponérselos y desde ese momento no se los saco más.

- ¿Qué tan mal ve este weon?* susurro para sí mientras se colocaba los anteojos.

Trato como pudo ver algo, pero no, le era demasiado difuso. Un poco mareado se los saco y restregó sus ojos "Que esta cagao weon" pensó mientras miraba el rostro despejado de su amigo "Si no fuera por la barba, los cachetes y el pelo te veriai igual que cuando estábamos en la u" sonrió ante el recuerdo de su Eddie joven.

No podía negar que el otro estaba 'rico' cuando lo conoció en la universidad, era uno de los factores por los que estaba con él, después de todo ¿A quién no llama la atención un cuerpo esculpido? Pero ahora, guatón, barbón, más de una vez le había dicho que no se dejara tanta barba, pero no, Edgar quería ser como un vikingo.

Suspiro pesado. A pesar de todos esos detalles lo amaba, le tiene tanta paciencia y eso era mucho decir, no sabía cómo el de rulos no se había hartado de sus constantes rabietas.

Estaba sacándole unos mechones de la cara al más alto cuando este comenzó a despertar.

- ¿Jaime? - Dijo dudoso mientras refregaba sus ojos y los estrechaba para tratar de enfocar mejor.

- Weon, que estai piti - bromeo el nombrado quien jugaba con las gafas frente a su amado.

- Si lo sé- bostezo somnoliento -Devuélveme los lentes será mejor - estiro su mano para alcanzarlos, pero el barbón actuó mas rápido y los dejo fuera de su alcance - Ya po, no wei, que de verdad no veo naipen.