APPA WUFAN (KRISTAO)

10CAP: ACCIDENTE

Tao se encontraba de un lado al otro sobre su cama pensado lo que pasaría con su vida de hoy en adelante con estos últimos acontecimientos que pasó en estos días; uno kris estaba indeciso de su preferencia sexual, dos; luhan se había ido, el mensaje que kris y tres; el que creía que era su amigo lo había dejado solo porque esperaba un hijo de otro que no fuera suyo, el hecho que suho se alejara le sorprendió pues este sabía que tao mantenía una relación con alguien.

El problema es su relación si es que se llama relación a lo que tiene con kris, pero el ojeroso tiene algo en mente si kris llegase a rechazar su hijo, hijos de ambos, daría por terminado esta relación que hace mucho se había podrido con la estúpida actitud del mayor, además de desaparecer de la vida de kris, este nunca sabría de su hijo a pesar que doliera esos pensamientos, iba a cumplirlas.

Será duro, lo sabe, porque alejarse de la presencia de kris era doloroso, lloro cuando este se mudó de casa y no saber más nada de kris sería la muerte, pero ahora tenía un pequeño o pequeña que crecía en él. Era suficiente motivo para seguir adelante sin necesidad de limosnear amor, porque ahora que le piensa es lo único que a echo desde hace mucho, sobre todo no auto valorarse.

Solo se humillo ante un hombre que parecía no vacilar por él, un hombre que no le defendió de las acreciones verbales de su hermano ¿valía la pena? Un hombre que lo a rechazaba y no decía sobre su relación ¡no valía la pena!

Tao llora porque la venda de sus ojos está cayendo, las lágrimas están limpiando esa capa ficticia, es un golpe muy duro pero ahora está pensado con la razón y no con el corazón porque hay un ser que ama mucho más que aquel hombre que lo único a echo es lastimarlo.

Tao mira una fotografía cuando era pequeño; extrañaba su infancia en aquel entonces no pensaba en los problemas simplemente actuaba, no conocía el dolor que ahora está sintiendo, era tan libre de preocupaciones.

No dolió cuando se dio cuenta que sus padres lo abandonaron en un orfanato.

La felicidad regreso cuando conoció a kris; el primer año en la universidad, como compañeros de habitación, cuando lo vio fue como un remolino de emociones que se batallo en el estómago del ojeroso, kris era muy guapo, además, de considerar la actitud de kris como una competencia, el mayor era tan imposible de persuadir, tan poco amistoso la mentalidad de tao era sacar otro lado del mayor y cuando lo logro se dio cuenta lo cercanos que se convirtieron el y kris, de una linda amistad habían terminado en un revolcón en la cama de un hotel, no se vieron las caras por un largo tiempo, hasta que los celos hizo su trabajo y decidieron tener algo más formal a escondidas de todos, aquello seria su secreto.

En su segundo año decidieron alquilar un departamento en un edifico que sería su nueva casa, aquella casa seria el testigo de la relación de la pareja.

Como el testigo de su sufrimiento aquellas cuatro paredes

Tao se puso de pie, fue a la cocina tomo entre sus manos un copa, abrió la nevera para sacar un poco de jugo, suspiro pues no tenía mucho que comer simplemente había una botella de agua, unos chocolates, aderezos, verduras y aquello no era alimentación, debía de cuidarse como la doctora le dijo, ya que, los primeros meses eran muy riesgosos. Cogió su chaqueta que estaba sobre el respaldo del sofá, su cartera que estaba en una mesita antes de entrar a su casa, salió con la esperanza que kris estuviera esperándolo pero eran tontas ilusiones. Sonrió amargamente y quiso llorar pero no le daría el gusto y también las hormonas no eran de gran ayuda pero si kris quería verlo vendría a verlo ahora que no le retenía nada.

Tao está acostumbrado a que sus ilusiones mueran.

Se fue a una tienda de comida más cercana de su casa, pidió la comida más saludable que había en el pequeño restaurant, miro alrededor, sintió vacío y solo bueno siempre estaba solo, siempre comía solo a pesar que kris fuera su novio y estuviera ahí.