Lejos III

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Narrador Lay

Habían pasado varios meses desde que llegué aquí, ahora el frío y gélido invierno había llegado a Seúl, aun no me podía acostumbrar del todo a esa ciudad, pero aun asi me gustaba mucho.
Era extraño, cuanto más lejos estaba de YiFan más preocupado estaba por él, supongo que cuando iba al mismo instituto que él podia verle y saber que estaba bien, pero ahora era imposible eso...
Me gustaría poder llamarle y contactarme con él pero YiFan ya no me necesita a su lado.

Hoy había sido un día como otro cualquiera, que no destacaba nada hasta que llego las once de la noche de Seúl. Cuando recibí una llamada desde China era extraño para mi ya que nadie excepto mi familia me llamaba.

- H-Hola -mi voz temblaba, estaba nervioso.

- YiXing ¿Qué tal estás? - su voz sonaba algo rara, quizá era por no haberla escuchado por tanto tiempo.

- Eh m-Muy bien ¿y tu? -escuche su risa. La risa de YiFan

- Eso me alegra.

- ¿YiFan estas bien? Tu voz suena muy rara. -No contestó mi pregunta...

- ¿Estas comiendo bien? ¿Estas divirtiendote? ¿Eres feliz allí?

- Ehh, si, si estoy comiendo bien, como tres comidas al dia, me gusta seúl a pesar del frío que esta haciendo, asi que soy muy feliz pero como decirlo te echo de menos siempre, mucho más que cuando estábamos en el instituto, por lo menos allí podía verte y saber cómo estabas. - y de golpe  silencio, podía escuchar sus quejas de dolor aunque no eran muy fuertes.

- Sabes te quiero...no tengo mucho tiempo ahora, solo queria escuchar tu voz y saber como estabas, te quiero, adiós. - y colgó sin darme tiempo de responder. Aquellas palabras me daban muy mala sensación. ¿Qué es lo qué había pasado? ¿Qué es lo que le estaba pasando?.

A la mañana siguiente, realmente estaba preocupado y estaba realmente distraído.
Asi que decidi salir de casa, hoy no tenía clases, por lo normal cuando no tenía clases salia con amigos pero hoy saldría solo. Cuando estaba en HongDae comprando algo recibí otra llamada era extraño también venia de China y no conocía para nada ese número.

- ¿Hola?

- Hola, esto ¿eres Zhang YiXing? -La voz de la otra linea se me hacia algo familiar.

- Si, ¿y tu, quién eres?

- S-soy Yue

- ¿Qué necesitas?

- Kris te necesita. Él está en estado crítico - aquella voz, la voz de Yue ahora estaba temblando y se escuchaban sus sollozos.
Estaba en estado de shock pero tenía que comprender que es lo que había pasado.

- ¿Q-Qué ha pasado?

- Ayer le apuñalaron...

- Como es posible si, él me llamo ayer.

- Cuando...yo le encontré estaba desangrado, estaba congelado, tan frío...y...sostenía su móvil en su mano...seguramente te llamo antes de desmayarse...

Desgraciado, podía haber llamado a una maldita ambulancia en vez de a mi. Eso es lo que había pensado.

- En que hospital ¿esta?

- Exo planet hospital

Y entonces colgué el teléfono y paré un taxi con el que volví a casa.

Cuando llegué y abrí la puerta me avalance sobre el portátil. Mi respiración estaba muy irregular.
Todo era culpa de ese estúpido. Mis lagrimas no paraban de salir por mis ojos. Mi corazón sentía una opresión muy fuerte. Estaba preocupado, muy preocupado.
Avise a mi universidad de que estaría ausente durante un tiempo, avise a mi compañero de piso y prepare algo de ropa y demás objetos rápidamente.

- No te puede pasar nada.

Aquel viaje de avión fue eterno. Cuando llegué, lo primero que hice fue ir al hospital. Llame a Yue para confirmar en qué habitación estaba.
En la tercera planta la octava puerta a la derecha. Y allí estaba...
Abrí la puerta y le vi allí... tan pálido. Cogí su mano y realmente estaba frío comparado con la temperatura normal que él tenía, Yifan es del tipo de persona que siempre tiene las manos cálidas pero ahora no estaban para nada cálidas.

- Wu YiFan que tonteria estabas haciendo ayer -dije entre lágrimas. -Sabes yo tambien te quiero y mucho, te quiero. Así que recupérate estúpido.

Pasó el primer día, seguía igual, pero ya no estaba en estado crítico ahora solo había que esperar a que despertara. Su color era horrible, seguía pálido, se le veía tan débil y él no era así...
El segundo día pasó y ante la gran insistencia de Yue ante la gran insistencia de mi madre volví a casa a descansar, ya que desde que llegué estuve en el hospital sin moverme ni irme a ningún lugar solo estaba a su lado. Aunque dormí en casa fui muy temprano al hospital.
Estaba comenzando el tercer día desde que estaba en coma...
Agarre su mano y recosté mi cabeza en su cama.

- YiFan, yo quería llamarte, quería verte, quería saber como te encontrabas, pero sentía que ya no me necesitabas. Te echo de menos,
mucho. Sabes te quiero, mucho más de lo que tu crees.

Aquel día pasó y tampoco despertó.
Aquella noche me volví a quedar a su lado.
El peso de una mano en mi cabeza me despertó.

Entonces le vi con una enorme sonrisa, mirándome.
Le abrace y sentí como pequeñas lágrimas caían sobre mi hombro, sentí como también mis lágrimas caían sobre el hombro de YiFan...

Por fín había despertado...

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