~Capítulo 2~

264 11 5
                                    

- Hola hermosa. - le dije con una sonrisa de oreja a oreja.

- ¿Te conozco? - me contestó sin apenas mirarme.

- No, pero espero que pronto sí.

- ¿Qué quieres de mi?

Me giré y le dije al camarero que me sirviera un chupito de tequila para mi también. Volví a voltear la cabeza.

- Solo invitarte a ese chupito. - le dije con mi famosa sonrisa pícara que hace que las chicas caigan a mis pies sin dudarlo ni un segundo.

- No hace falta. Ya soy mayorcita para pagarme yo misma lo que consumo. Pero gracias igualmente.

Le hice caso omiso ya que el camarero me sirvió el chupito.

-¿Un brindis? - le dije levantando la mano derecha con el chupito en la mano con una sonrisa.

Pero en cuanto me di cuenta se lo tomó de un trago sin mirarme. Me fijé en que se le derramaba una gota de su bebida por el cuello hasta llegar a su canalillo. La gota desapareció, adentrándose en su vestido azul ajustado. Me quedé embobada mirándole. Estaba que echaba fuego. Noté como mis bragas se mojaban. No podía ir más despacio. Estaba sufriendo. Pero no la podía dejar ir.

Sin que me diera cuenta por culpa de las imágenes pervertidas que se asomaban por mi mente con esa joven, la chica se marchó, dejándome a mi con las ganas.

No podía estar pasándome esto a mi. Siempre era a la inversa. Las mujeres siempre iban detrás de mi. No me lo podía creer. Tenía que conseguirla, así que corrí detrás de ella.

Amor entre paréntesis [lésbico]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora