Capítulo 55

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Efectivamente, había sido un disparo, el miedo se comenzó a apoderar de mi cuerpo cuando vi que todos observaban aterrados...al lado mio.

Louis: -¡_____!- la tome entre mis brazos totalmente asustado.

_____(tu): -Tranquilo Lou, estoy bien, calma- me sobo la espalda susurrandome para que me calmara.

Louis: -P-ero...¿entonces?...¿don-de?- pregunté viendo hacia los lados para buscar algún indicio de la bala.

_____(tu): -Si fue quién creo que fue, no tiene buena puntería- se hizo a un lado dejando ver un pequeño hoyo en uno de los floreros que estaban en el altar.

Louis: -Gracias, gracias Dios- repetí incontables veces abrazando a _____ con todas mis fuerzas mientras agradecía mirando al cielo.

-¡Hija!- llegaron sus padres con cara de preocupación a quitármela y a revisarla.

_____(tu): -Tranquila mamá, no me paso nada- la abrazaron igual de fuerte que yo.

Louis: -Señor, ¿están todos bien?- llego uno de los que eran de mi equipo de seguridad hablan por su radio, era el encargado de que ninguna fan o medio de comunicación entrara.

-Si, afortunadamente- asentí rápidamente aún en estado de shock.

Louis: -¡Se supone que ustedes debían estar a cargo de que no pasara nada!- les grite enojado.

-No sabemos lo que sucedió señor, de verdad, estuvimos vigilando en todo momento, debió ser alguna bala perdida por alguna fiesta, no lo se...- intento hablar suave para no para no alterarme más pero eso solo empeoro mi estado.

Louis: -¡¿Una bala perdida?!, ¡Ja!, y ¡y casualmente tuvo una perfecta trayectoria hacia _____ ¿verdad?!- explote sin acordarme de que estaba en una iglesia y todos me miraban.

Me reí sarcásticamente y entonces sentí como mi esposa llegaba y me abrazaba calidamente hasta ocultarse en mi pecho diciéndome que me calmara y dejara de gritar, mi expresión enojada de relajo poco a poco y desvié mi mirada de esos inútiles para concentrarme en corresponderle el abrazo, la envolví protectoramente como siempre lo hacía susurre sobre su cabello que tenía razón y que me perdonara.

Todos estaban preocupados de que volviera a suceder, nos quedamos un rato dentro de la iglesia hasta que los de seguridad dijeron que era seguro salir, que no había nada ni nadie que presentara algún peligro y que no encontraron a nadie que pudiera haber disparado, según ellos quedaron en fue una bala perdida o un estúpido misterio, pero por supuesto todos susurraban el nombre de una sola persona...Eleanor.

Después de todo lo que supe de ella no dudaría que ella fue capaz de esto, me daba una gran impotencia que nadie pudiera encerrarla en una maldita cárcel o en un jodido manicomio, ella estaba loca, de eso estaba seguro, nunca volví a tener noticias de ella desde la última vez que nos vimos, era como si se la hubiera tragado la tierra y ahora todo esto, no volvere a estar tranquilo hasta saber que ella está encerrada o algo así. Cuando las cosas por fin se calmaron y las personas olvidaron el incidente o al menos lo intentaban, decidimos irnos a la fiesta que se daría después de que el sacerdote nos casara. Era nuestro dia y no íbamos a permitir que nadie ni nada lo arruinará, hoy simplemente deberíamos ser felices y disfrutar.

Agradecí enormemente de que nadie mencionara lo que sucedió y que hicieran como si nada hubiera pasado ya que al fin y al cabo todo estaría en manos de los policías que rondaban alrededor de la fiesta y está vez esperaba que hicieran bien su trabajo. Salimos juntos a la entrada de la iglesia en donde nos iban a tomar fotografías, lanzar pétalos de rosa a los novios, felicitarnos y esas cosas.

Dejame cuidar de ti (Louis Tomlinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora