Era medio día, Baekhyun miraba el reloj avanzar lentamente, el hombre no había dejado de hablar ni un solo minuto desde que la consulta había dado inicio hasta que, gracias a un milagro divino o algo así, apareció un ángel a salvarle de tal tortura, un ángel llamado Hyeri que, por cierto, era su secretaria, y mejor amiga desde el jardín de infantes.— Señor, creo que tiene que ver esto...— interrumpió la joven tras abrir la puerta de golpe, llamando la atención de la pareja que consultaba y, por supuesto, la del mismo Baekhyun.
— Disculpen, tengo que atender algo, nos vemos la siguiente semana, ¡y recuerde dejar de revisar el refrigerador por las noches!— se despidió el chico saliendo de inmediato de su oficina.
— Joder, me has salvado el trasero, pero exageraste con eso de "señor"— dijo el pelinegro a la castaña, articulando una mueca divertida.
— Baek, en verdad hay algo que tienes que ver en recepción, hay una loca que exige verte, le he dicho ya unas cincuenta veces que necesita poner una cita porque eres el jodido mejor psicólogo del Seúl, pero no entiende, está chiflada.— informó la chica, realmente irritada, a lo que Baekhyun solo soltó una risa.
— Las personas chifladas son mi especialidad, ¿lo olvidas?— sonrío ladinamente, comenzando a caminar hacia recepción junto a su secretaria.
Una vez llegaron, Baekhyun se dio cuenta de que Hyeri no exageró, pues la mujer estaba casi golpeando a la recepcionista, de inmediato se acercó a la mujer.
— Hooola, qué tal, señorita— sonrió ampliamente, llamando la atención de la mujer quien detuvo su histeria casi en automático al ver al muchacho.
— Usted es el gran doctor Byun...— halagó la mujer embelesada con el joven, quien miró de reojo a su amiga, sonriendo halagado, la chica rodó los ojos, seguía harta con la mujer.
— En realidad, no soy doctor y, bueno, dada mi escasa estatura, tampoco diría que muy grande.— bromeó y la mujer soltó una carcajada tan exagerada que hasta Byun se asustó.— ¿me buscaba para?...— retomó el joven, la mujer recuperó un poco su compostura.
— ¿Porqué no vamos a su oficina, joven Byun?
— Preferiría que no— dijo seguido de alargar una risa fingida, la señora asintió poco convencida.
— Entonces, ¿qué quería la loca?— preguntó la muchacha.
— Una terapia de pareja junto a su esposo, llevan cuatro años casados, él tiene 24 años, ella.. Adivina.— respondió el chico sorbiendo de su malteada.
— ¿Sesenta?
— Vamos, Hyeri, ¿qué te ha hecho esa pobre señora?
— Gritar demasiado, eso hizo, pero ya, dale, ¿qué edad tiene?
— Treinta y seis.— la chica se quedó boquiabierta.
—¿Qué carajo?— preguntó, después soltando un eructo.
— Cuanta clase, cariño. Pues, es una abogada importante, o al menos eso dijo, y su espocito también lo es.
— ¿Qué clase de problemas podrían tener? A parte de, no sé ¿todos?— dijo sarcástica, el chico quiso regañarle por burlesca, pero no pudo evitar reír.
— Hoy mismo los atiendo, de hecho, ya vamos, que no quiero que me demanden por impuntualidad.— Bromeó y río orgulloso de su chiste, su amiga solo alzó ambas cejas sorprendida de lo malo que había sido.
El silencio en la oficina del joven Byun era tan incomodo que hubiera preferido la demanda por impuntualidad, claro que esa se la llevaría el anteriormente nombrado "espocito", pues el joven psicólogo había tenido ya media hora soportando la mirada acosadora de la mujer que había conocido esa misma mañana en recepción.
— Y... ¿Cuánto tienen de conocers...— comenzó a preguntar el chico, pero fue interrumpido por el sonido brusco de la puerta abriéndose. Ambos en la oficina enfocaron su vista a la persona que entraba como "Pedro por su casa" y tomaba asiento y depositaba un exagerado beso tronador a la cabeza de la mujer.
— Buenas tardes, lamentó el retraso, olvidé que hoy veníamos al loquero. Chanyeol Park.— se presentó el alto y joven abogado, Baekhyun permaneció aproximadamente un minuto embobado con el chico, hasta que finalmente reaccionó.
— Baekhyun Byun, un placer— extendió su mano para estrecharla con el joven, pero éste se limitó a soltar una risa ladina y negar.
— Me gustaría decir lo mismo, pero yo no quería venir aquí.— confesó encogiéndose de hombros, recibiendo un leve golpe en el brazo por parte de su esposa, el psicólogo solo artículo una sonrisa fingida y llevó su vista a el lápiz que sostenía en su diestra. Será una larga consulta, sé pensó.
— Su cabello está rebelde hoy, Baekhyun Byun— comentó el alto señalándole con el índice al notar como el joven psicólogo no dejaba de ordenar su flequillo con nerviosismo.
— Estoy consciente de ello, joven Park. Y bien, ¿qué los ha traído hasta acá?— preguntó decidiendo comenzar con su trabajo, la mujer estaba a punto de hablar cuando fue interrumpido por un bufido por parte de su pareja.
—¿Podrías dejar de ser tan inmaduro?— preguntó a regañadientes la mujer.
— Eh... noup, te recuerdo que tengo como sesenta años menos que tú.— dijo tranquilamente, Baekhyun casi se atraganta con su propia saliva.
— ¿Porqué no le cuentas tú todo, ah?— retó la mujer casi en grito, el chico asintió relajado y se giró a ver a Baekhyun, el más alto le echó una mirada esperando su aprobación.
— A-adelante— alentó ansioso.
ESTÁS LEYENDO
Terapia Inversa (ChanBaek)
FanfictionBaekhyun, un profesional y destacado psicólogo especializado en terapia de pareja, reconocido por su buen desempeño laboral a tan temprana edad, o al menos, eso hasta que un día entró por la puerta de su consultorio un muy alto y poco reconocido abo...