¿Venganza?

Capítulo 2

Nuestro vuelo sale en dos horas más —dice Leo sentandose al lado mío, yo asentí mientras veía la cadena favorita de mamá pues era de oro y tenía una niña, que me representa a mí, suspiré. —

—¿quién es el otro entrenador?—pregunte con curiosidad.—

— se llama Axel Montana, te agradara.— asentí—

— ¿hace cuánto te uniste a la policía? —el rio, yo lo mire extrañada.— ¿qué es gracioso?—pregunté.—

—yo no me uní a la policía Axel y yo no estamos officialmente dentro, no quisimos —respondió.—

—¿porqué?— pregunté con curiosidad.—

—porque, digamos que no nos gusta seguir órdenes, asi que somos como una nueva rama, dado que somos los mejores de nuestro nivel no nos quisieron perder, asi que somos como agentes secretos, nadie sabe quiénes somos en realidad—asiento.—

—ya veo porque me mandaron con ustedes mi tío me conoce muy bien—el me miró con curiosidad.—

—¿porqué?— preguntó y yo respondí —

—tampoco me gusta seguir órdenes —sonreí, el sonrió también —

— y ¿cómo estas? Me imaginó que debe ser difícil dejar a tus amigos—dijo, y yo negué. —

—para nada, yo jamás tuve amigos ni dentro ni fuera del instituto, dado que fui la marginada, pero creó que después de esto será un nuevo comienzo para mí —asiente.—

—puedes contar con mi apoyó — seguimos conversando hasta que llegó la hora de subir a nuestro vuelo, subimos, y esperamos a que se llenara, llame a mi tío, ellos se iban mañana a mexico dado que ellos tenían que empacar todo porque se mudaban allá, ahí estaremos mas seguros es lo que dijo el tío Victor, luego de hablar con él empezó a hablar la azafata.—

—Porfavor abrochen sus cinturones y no se levanten de sus asientos hasta que hallamos llegado a México, gracias.— abrochamos nuestro cinturones, yo me puse los audifonos y empezo ah sonar Martin Garrix, hasta que me quede dormida, pensando en como sería el otro entrenador.

Sentí como alguien quitaba mis audifonos, y me hablaba.— Alex ya llegamos — reconocí la voz de Leo, abrí mis ojos y me desabroche el cinturón para luego bajar mis maletas, Leo me ayudó a bajarlas.—

—¿sabes hablar español?—me preguntó, yo asentí—

— en realidad yo nací en chile, me vine a E.E.U.U cuando mi padre murió — no me gustaba hablar mucho de mi padre asi que no dije nada más. —

—que bueno, no quería tener que estar traduciendo a cada momento —dijo y paro un taxi, nos subimos y le dio la direccion al chofer.—

— el instituto al que vamos queda a unas diez cuadras de nuestro depa— asentí— y bueno, me dijeron por ahí que te facinan los audi —yo abrí mis ojos.—

—¿qué quieres decir con eso? —pregunté.—

—quee como Axel y yo tenemos nuestros propios autos, pensamos que tu deberías tener uno también, así que hable con tu tío yyy....—alargo la "y", se bajo, esperó a que me bajara, ni siquiera me había fijado que ya habiamos llegado, Leo bajo nuestras maletas.— mira a tu izquierda— yo lo hice y OH.MY.GOD—

—¡no puede ser!—grité emocionada, un audi rs5 azúl estaba estacionado adelante de un camaro negro, abraze a Leo.— ¡Gracias! ¡Gracias! ¡Gracias!—repetia cómo una niña pequeña—

—solo tienes que aprender a manejar — yo negué— no es necesario ya sé manejar— dije recordando los buenos tiempos hace 1 año, yo corría en carreras ilegales, era una de las mejores dejé de hacerlo después de que tuve un accidente, mi contrincante hizo trampa cortándole lo frenos a mi auto, al accidente fue demasiado gravé había tenio otros peores pero éste fue dónde mas daño me hice, aún no entiendo como no me di cuenta antes de que les habían cortado los frenos.— corría en carreras ilegales.— dije y el me miró sorprendido—