II

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Estaba nervioso, no como Yoongi, que lucia tan calmado y sereno, yo solo estaba rogando que no me trataran como antes, eso me rompería el corazón, seria muy difícil para mi seguir como estaba todo antes, ni siquiera Yoongi me podría ayudar, pero todo cambara, luciré lo mas normal que pueda, y así, tal ves así, nadie se de cuenta

Soltándome del agarre de Suga, él lentamente abrió la puerta, y para nuestra desgracia ya estaba el profesor. Mi corazón empezó a latir rápidamente, por que siempre me salían las cosas mal, por que, pero no hay nada que hacer, y revertir el tiempo no era opción, así que ambos afrontamos el hecho de que se nos hizo tarde y estábamos esperando nuestro castigo

-A, miren quienes decidieron aparecer, que mala primera impresión dan desde un comienzo chicos- suspiro- no hay nada que hacer, preséntense y vallan a sentarse- dijo mirándonos con decepción, no parecía ser tan malo, algo bueno

Con los latidos a mil por hora de mi corazón, me encamine, junto a Suga, al frente del salón, donde todos miraban expectantes, analizándonos detalle por detalle, buscando algún error en nosotros.

Oí una chicas hablar y sonreír, por otro lado los chicos no hacían nada, era una escena muy incomoda, y mas con el silencio que todo el curso aportaba, ya tenia los nervios a flor de piel, hasta estaba empezando a temblar.

Suga lo noto, por lo que me dio una sonrisa para que me relajara, pero solo consiguió que se escuchara un estallido de risa por parte de algunos alumnos

-La nueva pareja gay del salón- grito un chico desde el fondo y otros mas se empezaron a reír descontroladamente

No sabia que hacer, me paralice, por que me tenia que pasar esto otra ves, no me basto en el otro colegio, que me ridiculizaran e humillaran por mis preferencias sexuales.

Pese a no ser novio de Yoongi, me gustaban los hombres, eso él no lo sabia, y esa es la única y principal razón por la que decidí cambiar me colegio, ya no soportaba que se rieran de mi, era muy doloroso, casi logran que me suicide, si no fuera por Suga, mi único y mejor amigo, ya no estaría aquí.

Observaba a todos riendo, y al profesor que intentaba calmarlos, y nos miraba como diciendo "lo siento".

Entre tantos gritos pude ver a alguien que no hacia nada, ni nos miraba, era un chico de cabellos castaño oscuro, con rasgos simplemente hermosos, pero que tenia la mirada apagada, solo, en la ultima fila, del lado de la ventana, mirando por ella, sin expresión alguna.

Dándose vuelta chocamos miradas, me dirigió una mirada helada, sin algún sentimiento en lo mas mínimo, yo, por mi parte aparte rápidamente la mirada y me encontré con la de Suga, quien estaba con el seño fruncido, estaba enojado, eso era mas que obvio. Me despeino el cabello y sin decir nada me tomo de la mano y no dirigimos a los únicos asientos libres, que era uno al lado de ese misterioso chico y otro al lado de ese

Me senté al lado del desconocido, y Suga a mi lado, esta acción provoco que todos se callaran, provocando un silencio aun mas incomodo que el de hace 5 minutos, y todos voltearon a vernos, con los ojos bien abiertos, hasta que estallaron en risas de nuevo

-Bueno chicos, ya clamensen!!!- grito ya molesto el profesor chocando el borrador con el pizarron haciendo que de este salga un fuerte sonido que hizo que todos dieran un saltito del susto

El resto no fue muy entretenido, el profesor dio una charla del comportamiento en el aula que duro mas de media hora, haciendo énfasis en no burlarse de nadie, ni por gustos, ni nada, que para eso pueden pararse e irse, obviamente nadie lo hizo, pero vi a muchos con las intenciones de levantarse e irse a sus casas, pero nadie se atrevió

Terminando su sermón, el profesor hizo que al fin nos presentáramos, aunque yo no quería, lo tenia que hacer. Primero fue Suga, y luego yo. Cuando acabamos, yo ya estaba mas rojo que nariz de payaso, lo que no me beneficiaba, ya que todos me miraban con la risa en la boca, hasta juro haber escuchado "este es mas mina que hombre" lo que me hizo entristecer aun mas, quedándome callado el resto de la hora, ignorando completamente las explicaciones del profesor y las constantes preguntas de Suga de "estas bien?" una y otra ves

Tocando el timbre para el receso, Yoongi me tomo del brazo y empezamos a caminar hasta llegar hasta la azotea, según me dijo quería hablar conmigo de algo serio y necesitaba tranquilidad. Para su suerte, y no se si para la mía, llegamos y estaba completamente desolado, no había rastro de existencia alguna.

El sol azotaba con fuerza mi rostro, haciendo que lo único que pudiese ver bien era a Suga parado en frente mio, con una mirada de tristeza pero a la ves decepción

¿se habrá dado cuenta?

Espero que no, me repetía uno y otra ves

Estuvimos unos minutos callados, solo con el sonido de algunos pájaros que había por allí, y la tenue brisa del viento que nos chocaba, causando un escalofríos en mi, que no se si era solo por el viento, yo apostaría a que era mas de los nervios que tenia al ver a Yoongi parado en frente mio, sin decir palabra alguna, solo analizando cada centímetro de mi frágil cuerpo

-Por que no me lo dijiste antes?- rompiendo el silencio que ya me estaba estresando, Yoongi dijo las palabras que temía, pero que inevitablemente sabia que me las diría

-Q-que cosa?- dije pasando por incrédulo, aunque tenia la conciencia suficiente de que sabia exactamente mis razones, y era lo que mas me asustaba

¿Y si se va de mi lado?

Eso no pasara, quiero creer que él es diferente, quiero pensar que el seguirá con migo a pesar de todo, que nuestra amistad no cambiara

-Tranquilo galletita- dijo despeinando mi cabellos- sabes que nunca te dejare a pesar de todo- y dicho eso me envolvió en un cálido abrazo.

Gracias Yoongi, no sabes cuanto lo necesitaba. Correspondiendo casi inmediatamente a su acción, me deje llevar, y con mi cabeza escondida en su pecho, pude, después de tanto tiempo, llorar sin privarme de nada, desahogarme, dejar todos esos sentimientos que me estaban carcomiendo por dentro, dejar de ser, por lo menos por un instante, ese chico que aparenta fuerza interna, para volverme un chico frágil y débil, que necesita el apoyo de su amigo, su único amigo.

-Gracias- dije casi en un suspiro, aliviado









Sleep Corrupter [Jikook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora