Mara

El empleo y...¿banco de Pridgetown?

La alarma sonó a las 7:00am. Me levanté, todavía en pijama y me dirigí hacía la cocina para prepararme un delicioso café. Me senté y le dí un sorbo.

'Diag, esta frío' pensé.

Lo metí al microondas y me sente en el sillón ubicado justo al lado de mi ventana. Observé como se veía Nueva York a las 7:15 con la escaza iluminación del sol pero recompensada con las luces de los autos y de los semáforos. Pensé como sería sin luces, sin ruido, sin alboroto. Tranquilo, sereno. El 'pi,pi' del microondas interrumpió mis pensamientos. Tomé hasta la ultima gota que había en mi taza y me dirigí a cambiarme. Olí mi pijama e hice un gesto de desagrado.

'Si, tengo que lavarlo.'

Me puse un jean, una camisa blanca, una corbata gris y, por supuesto, el saco que uso para ir a la oficina.

O usaba.

Me despidieron de mi trabajo (porque al parecer esta mal visto que alguien le grite a su novia por teléfono en el trabajo) hace una semana y tengo algunas entrevistas en otros lugares a las que hoy tengo que ir.

Estoy muy preocupado y nervioso, pues si no consigo trabajo, no sé que es lo que voy a hacer.

Saqué de mi bolsillo la arrugada lista de lugares que necesitan un empleado que me había dado mi mejor amigo, Lucas.

Lucas es mi mejor amigo desde que tengo memoria.

Fuimos a el preescolar, al primario y al secundario juntos. Él trabaja en asesoría para empleos, y es por eso, que me dió algunos de los posibles lugares donde yo podría ir para conseguir un trabajo.

Miré el reloj. 7:30.

'Bien, todavía estoy a tiempo'

Bajé las escaleras y caminé dos cuadras hasta el estacionamiento para buscar mi auto.

Conducí hacía el primer lugar de la lista.

-Banco de Pridgetown.

'Okey, comenzamos con un banco'

Este estaba ubicado en la calle Liberg y Gruser.

Era muy bonito sinceramente.

Entré y busqué al encargado.

Ví a un hombre barriendo y me acerqué a él.

"Will" se leía en su placa.

-Hola, mi nombre es Frederick Sanders. Tengo una cita con el señor Newell.

-Oh, lo esta esperando en su oficina, pase por aquí por favor.

Me condujo por un largo pasillo hacía una gran puerta.

-Debo ir a terminar mi trabajo. Buena suerte.-dijo despidiéndose.