8va y última Carta

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Para Emma, mi bella hija:

Mi dulce y preciosa niña decidí hacer especial y algo extensa esta carta, porque será la última vez que me comunique por este medio contigo.

Mi primera, única y última princesa que tendré, desde el momento que supe que tu venías en camino no sabes la felicidad que me embargo, ame a tu madre mucho y saber que algo fruto de nuestro amor crecía en su interior me hizo sentir de una manera inexplicable.

Como bien te dije tu madre te amaba mucho antes de tenerte siquiera en una foto de ecografía, ya te imaginarás cuan grande era su amor por tí. Pero por obra del destino Dios no quisó que mamá te conociera o que tu la conocieras a ella.

Desde pequeña siempre has sido una niña ejemplar, estudiosa y muy responsable, no pude haber pedido otra hija mejor porque ya no lo hay, tu siempre serás mi mayor orgullo y bendición.

Como te había dicho yo estoy muy emfermo, creí que podría manejarlo y hacer cuenta que todo seguía igual que antes pero es algo imnegable, la falta de cabello, mi delgadez y mi animó no ayudaban.

Si te escribo esta última carta es para despedirme, mi tiempo en esta tierra ha terminado y es hora de que parta  hacía otro lugar mejor, cuida de tus hijos, educalos para crezcan con valores como tú, tampoco te olvides de tus hermanos guíalos como una hermana mayor debe hacer, a Alice le dejo una carta te suplico que le des personalmente.

Esto no es fácil mi niña, estar postrado en un cama con un terrible dolor en el pecho, pero no por el cáncer, si no por que se los dejaré y ya no volveré, eso me duele enormemente.

Te adoro mi cielo, papá siempre te cuidará y guiará  hasta que esos bellos sáfiros se apaguen y dejen de brillar como siempre lo hacen, recuerda tú siempre serás mi pequeña.

Atte: Con mucho amor para mi pequeña princesa.

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—Emma amor ya tenemos que irnos —me llama Alonso, pero ni siquiera puedo mantenerme en pie estoy sentada hecha un mar de lágrimas al lado de la lápida de mi padre

—No puedo Alonso me duele el pecho, mi papá, mi mejor amigo y compañero de aventuras se ha marchado -—le digo llorando, hasta me arden los ojos de tanto llorar

—Cielo tu papá estaría muy triste si te viera llorar, sabes que al él no le gustaba verte así —me dice otra vez mi esposo, y tiene razón pero es algo insoportable, imaginar que al que viste desde pequeña, te peino, te cuido y amo más que a su vida ya no está, es algo muy doloroso y siempre lo será, lo voy a llevar en mi memoria hasta que yo también deje de existir en la tierra y me encuentre con mi padre y mi verdadera madre en el cielo, me acercó a su tumba y le susurro: "Te amo mucho papá, siempre seré tu pequeña".

Fin.

Cartas a mi pequeña Donde viven las historias. Descúbrelo ahora