Capítulo Uno

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Emma miraba hacia el vasto océano y sonrió cuando la brisa rozó su rostro y revolvió su cabello. Podría acostumbrarse a estar en un barco. Fue un alivio tener un poco de libertad después de haber pasado mucho tiempo atrapada en el castillo. Se sentía tan bien estar en el mar abierto. Ella estaba en una misión diplomática hacia Arendelle, para convencer a la nueva reina, Elsa, unirse en una alianza militar con el reino del Bosque Encantado. La esperanza era reunir un ejército lo suficientemente grande como para irrumpir la mansión de Rumplestilskin al haber encontrado una manera de derrotarlo. Era una posibilidad remota, pero él merecía pagar por todo lo que había hecho.

"Su Alteza, una tormenta se dirige hacia nosotros" dijo el capitán con voz grave, interrumpiendo los pensamientos de Emma.

"¿Alguna razón para preocuparse?" Ella preguntó.

"Nada malo. Probablemente solo un poco de lluvia, pero sería bueno estar preparados" Se inclinó para mirar hacia el horizonte, cuando de repente el sonido de la alarma sonó. Lo cual significaba una sola cosa, piratas.

"Su Alteza, debe buscar refugio en la cabina del capitán" el primer oficial le dijo. "Estará segura ahí. Si el barco es abordado podría esconderse en el armario".

"¿Quieres que me esconda?" El primer oficial le devolvió una mirada angustiada. "¡Puedo luchar! Me gustaría ver lo que estos piratas se atreverían hacer frente a mi" añadió con voz alta.

"Perdóneme princesa, pero todos sabemos cuán importante es esta misión. No sucederá sin usted, es nuestra prioridad. Cada hombre a bordo de este barco ha hecho un juramento de arriesgar su vida con el fin de proteger la suya. Por favor su alteza..." Ella no podía ignorar la lógica de su declaración.

"Tienes razón" respondió antes de caminar hacia la cabina del capitán, al llegar en las escaleras, la lluvia comenzó. Ahora lo único que podía hacer era esperar.

En ningún momento pudo escuchar personas gritar, correr o disparar. Ella quería desesperadamente correr a la cubierta y luchar, pero sabía que una princesa debía permanecer segura bajo cubierta. Esta fue una de esas ocasiones en las que odiaba ser una princesa, porque significaba que otros tenían que luchar en su lugar.

Emma solo podía adivinar el resultado de la batalla cuando todo quedó en silencio a excepción del sonido de la fuerte lluvia. Escuchó con atención las voces por encima de ella mientras que en ella se instalaba el sentimiento de que ellos no eran los victoriosos, se metió silenciosamente al armario. Sus temores se confirmaron cuando escuchó a alguien bajando las escaleras seguido de unas ásperas voces. Alcanzo lentamente la daga que siempre guardaba en su bota y miró a través de la pequeña rendija de la puerta. Pudo ver dos piratas y su capitán de la guardia real, contuvo el aliento.

"El capitán sabe que hay algo especial abordo, ahora, ¿Dónde está?" Un hombre preguntó mientras sostenía una daga en la garganta del capitán de la guardia.

"Estamos solo con un mensaje para el Rey y la Reina, es todo".

"¿Solo un mensaje? hmm... nunca he visto un barco mensajero tan armado" el otro pirata dijo "¨Creo que solo echaremos un vistazo a estos mensajes por usted"

Emma oía al pirata arrastrando los pies a través de papeles. Si el pirata mirara lo suficientemente cerca, era seguro que notaria una pista sobre ella a bordo del barco. El capitán dio un rápido vistazo al armario, pero no fue lo suficientemente rápido. El pirata presionó más la daga contra su piel.

"¿Qué hay en el armario?

"N-nada" el capitán tartamudeó.

"Bill, revisa el armario" ordenó.

Emma se preparó, sus dedos se cerraron con fuerza alrededor de su daga. Lo que Emma no vio era la mano de Billy en su espada cuando entro al armario, colocó la daga lista para atacar pero este solo la golpeó con la empuñadura de su espada.

"¿Quién es ella?" Bill le preguntó al capitán.

Sangre comenzó a gotear del cuello del capitán, antes de que el rompiera en un susurro "La princesa".

Jackson, el otro pirata, llevó al capitán de nuevo a cubierta mientras Bill llevaba a Emma.

"Es una princesa, capitán". Bill gritó a Hook sobre la lluvia.

Hook se paró enfrente del otro capitán y sonrió "Entonces, era una princesa lo que estabas escondiendo desde el principio. Interesante..." dijo con una sonrisa de satisfacción formándose en sus labios.

Después de saquear el barco real, Hook y su tripulación volvieron al Jolly Roger. Bill se mantuvo cerca de Hook con la princesa en sus brazos. Su dorado cabello mojado le cubría el rostro, a Hook no le importo mirarle la cara para ver como lucia su prisionera. Una princesa podría ser una linda decoración para su barco.

"¿Dónde la quiere?" Le preguntó Bill.

"Llévala a mi camarote. Y átale las manos" Bill le dio una mirada desconcertada "Dijiste que te iba a atacar con una daga" él le contesto con aire molesto.

Cuando Bill regreso a la cubierta, su capitán se encontraba al timón "Estas son las cartas que encontramos en el barco"

Hook entregó las cartas a su primer tripulante, Smee, este comenzó a leer los documentos. Parecía que la princesa estaba en una misión diplomática para formar una alianza militar. Extraño enviar a una chica en un viaje tan peligroso, pensó. A medida que continuó leyendo se dio cuenta de que la alianza era contra el Oscuro. Arrugó el papel en un ataque de ira mientras los recuerdos del cocodrilo volvían a su mente. Empujó a Smee fuera de su camino. "Ve a ver si nuestra huésped está despierta. Si lo está, tráela a la cubierta, "ordenó. Smee corrió tan rápido como pudo.

Mientras tanto, Emma había despertado. Abrió sus ojos lentamente, sus parpados se sentían tan pesados que le llevo un momento poder abrirlos completamente. Se frotó la cabeza e hizo una mueca de dolor al recordar su estúpido error. No se sorprendió de que sus muñecas estuvieran atadas, pero no esperaba que estuvieran tan ajustadas. Miro alrededor, familiarizándose con su nuevo entorno. La cabina era de un tamaño decente, la cama en la que estaba sentada era pequeña, y había estanterías llenas de libros y otras baratijas. Había algo acerca del lugar que la hacía pensar que ella había estado allí antes. Pero eso era imposible, se dijo a sí misma.

La puerta se abrió y un hombre gordo con una gorra roja entró. "Bueno, haz despertado" Él dijo. "El capitán quiere verte"

"No, por favor. En esa demanda solo puedo asumir... "Emma respondió con frialdad. El hombre solo la miró un momento, antes de que la tirara de las muñecas hasta la cubierta, su visión tardo en adaptarse a la luz brillante.

Fue rodeada por toda la tripulación de piratas. Miro a sus captores, lucían temibles pero algo acerca de algunos miembros le resultaban vagamente familiar.

Un miembro de la tripulación le susurró a su compañero de al lado "¿No luce la princesa un poco familiar?"

"Aye" su compañero replicó "pero eso es imposible. Ella debe estar muerta desde hace mucho tiempo".

Pesados pasos sonaban detrás de ella, Emma se volteó para poder mirar al hombre al que le pertenecían. La manera en la que la tripulación se apartó solo podría significar que él era el capitán, el renombrado Capitán Hook. Por supuesto que ella había escuchado de él, el hombre que estaba causando serios daños a los barcos comerciantes de todos los reinos.

Se mantuvo de pie, con los hombros hacia atrás y la cabeza en alto, se preparaba para encontrarse con el hombre que la había raptado. Su figura se bloqueó momentáneamente por el sol, y sus ojos inmediatamente cayeron a la vista de la referencia de su nombre, el garfio brillaba con la luz del sol. Sus ojos recorrieron su vestimenta de cuero hasta llegar a su rostro. Esos ojos azules.

"¿Killian?" Ella contuvo el aliento, No podía creerlo.

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