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Hoooooolaaaaaaaa disculpen por no actualizar ayer, no pude subir el capítulo debido a las carreras 😂😅

Oh, también...en agradecimiento a mi dulce OwlPotterhead ❤️ les traigo un...un...*redoble de tambores* ¡¡¡maratón!!!🎉🎉🎉🎉🎉🎉 los publicaré a lo largo de la semana 😉 no estoy mil por ciento segura...pero quizá sean 2 capítulos más. En fin, besos, abrazos y besos y más besos 💋💋💋💋💋

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- Eh...yo...-realmente yo no sabía a quién defender, así que preferí mantenerme neutral- Chicas, cálmense, por favor.

- ¿Eso es todo lo que dirás?-Julieta colocó sus manos en su cadera e inclinó la cabeza con el ceño fruncido.

- Vamos, hermano. Debes estar bromeando ¿el sexo te mantiene lo suficientemente manipulable?

- ¡Estoy harta! No puedo creer que seas tan...tan ¡indeciso! Mierda, eres un idiota sin capacidad de decidir algo por ti mismo, siempre dejarás que te manipulen, porque es lo único que sabes hacer-me miró de frente, con desprecio total- Christian, me largo.

Claro, estaba totalmente dispuesto a dejarla marcharse...pero...mi madre estaba tan feliz de que saliese con ella...y...Julieta...quizá Julieta era mi única salida de todo eso...

- Julieta...por favor...detente...no te vayas-susurré y sentí la mirada molesta de Azulito.

- ¿Irme? Idiota, llévame a casa-y siguió caminando.

- Azula...yo...-no tenía el valor para ver su rostro, así que me concentré en una mancha que había en el suelo.

- De verdad, se nota que son la pareja del siglo-exclamó sarcástica.

- Lamento lo que dijo Julieta.

- A la mierda las palabras de esa zorra loca, quien me preocupa eres tú. Christian ¿en qué mierda piensas?

- Yo...

- ¿Comprendes que esta relación no es sana? Esa tipa no te valora, no puede. Esto va a terminar por hacerte daño, más si ella descubre lo de Michael, puede usarlo contra ti y hacerte mal, puede amenazarte con eso. Además, ambos sabemos a quién quieres en realidad.

- ¡Tú no sabes nada! ¿No lo ves? Azula, si sigo con Julieta es por dos simples razones: porque complace a mi madre y...¡y porque es mi salida! Si me obligo a quererla, en algún momento, olvidaré mis sentimientos por Mich...y volveré...volveré a ser normal...por fin...seré igual que el resto.

- ¿De qué mierda hablas?

- Vaya, no lo has notado ¿eh?-negué con la cabeza- No estoy con Julieta por ser un idiota masoquista...es porque envidio al resto y quiero lo que ellos son sin detenerse a pensarlo: son normales. Envidio el hecho de que puedan salir con la persona que aman, tomarse de las manos en público, besarse cuando van a sus citas, mostrar cómo si nada el hecho de estar saliendo, o simplemente, presentárselo a sus padres, sin tener que dar mayor explicación que un: es mi novia. Vaya, los envidio y no tienes idea de cuánto quiero...yo...realmente quiero ser...normal, no tener que enfrentar todas las dificultades que los..."anormales" pasan, Azula, dime ¿es mucho pedir? No, no lo es, pero conseguirlo, es condenadamente difícil. Lo sé, lo sé, me contradigo, mis palabras y mis acciones no tienen sentido...sí, rechacé a Mich y tuve sexo posteriormente con David...pero...¡no es lo mismo! Con David da igual, no me importa...pero Mich...de él no hubiera hecho más que enamorarme otro poco...hundirme...cuando realmente...quiero lo contrario-me miró un momento, seria, y luego entró en su departamento, dándome la espalda, caminé tras ella y cerré la puerta tras de mí- Azula, vamos, dime algo que me conforte un poco, eres mi hermana.

- Christian...todo esto es una verdadera mierda...es decir...¿entiendes a quién se lo estás diciendo? Yo...no me refiero al hecho de que yo sea tu hermana...me refiero a que...yo soy lo que tú no quieres ser...no, más bien, lo que tú no quieres aceptar que eres...porque no puedes...no puedes cambiar quien realmente eres, y no está mal ser tú mismo. Christian, estás saliendo con esa chica para cometer el peor error de toda tu vida...fingir ser quien no eres...y yo te puedo decir, por experiencia propia, que una vez que emprendes esa mentira...que te hundes en eso...salir...escapar...mostrar la verdad es...es muy difícil, porque...ahí sí, debes enfrentar...enfrentar, quizá tú solo, aquello a lo que le temes...de lo que te has estado ocultando todo ese tiempo-giró bruscamente, apretando su mandíbula y negó con la cabeza mientras sus ojos se humedecían- Sé que puedes tener miedo...sé que te debes sentir asustado...porque lo estarás de sólo pensar en qué pasará si lo dices, porque enfrentar a tus padres...mirarlos y decirles que te gusta alguien de tu mismo sexo...es difícil...muy, muy, muy difícil. Tener que soportar su mirada de desaprobación, de miedo, de asco, de decepción...es la cosa más aterradora del mundo, lo sé porque yo pasé por eso, sentí en lo que es que tu mundo se desmorone...me...me odié a mí misma por confesar la verdad...me di asco-podía ver expresado en su rostro un terrible dolor, el dolor que solamente ella sabía por cuánto tiempo se había callado y aguantado, lloraba y lloraba, quizá tratando frenar sus lágrimas, las cuales caían sobre los lentes que llevaba en el cuello de su playera- Y...es cuando te detestas a ti mismo por ser quien eres...y finges...y tratas de compensar a aquellos que has decepcionado...y te cuentes terriblemente culpable por haberte sentido libre al confesar la verdad...¡pero nada de eso es malo! No es malo ser quien eres...pero...de pronto...alguien pone su mano en tu hombro y te sonríe como siempre...y te dice que te quiere sin importar nada...¡ahí te das cuenta que nunca estuviste solo! Se vuelve tu faro...tu alegría...tu apoyo...tú, Christian, fuiste mi luz desde siempre...por eso, me juré que iba a ser fuerte para ti...y siempre estuve dispuesta a defenderte. Antes, que era una idiota con un autoestima de mierda, ahora, que soy una cabrona sin vergüenza, y en el futuro...siendo lo que sea...siempre estaré ahí para ti...

- Azulito...

- Cuando Tatiana me dijo que tú...que no...yo quise...no pude...no podía dejarte solo...aunque, en realidad, nunca lo has estado, con o sin mí, siempre hubo quien te amó. Mich y tú, desde siempre, estuvieron demostrando a ojos de quien se detenía a analizarlos, el amor que se tenían...que se tienen...y yo...siempre estuve dispuesta a apoyarlos...aunque tú fueses fuerte y él también...por eso...esto que dices...y tus acciones...todo eso, Christian, me...me...no me molestan...solo...me decepcionas. Me deseñciona ver que tú...a quien siempre he considerado fuerte y sensible en proporciones casi perfectas...se dejase influenciar tanto por ellos.

Agachó la cabeza un momento, dándome el tiempo suficiente para sentirme una mierda.

- Discúlpame, Azulito.

- Tristemente, aprendemos mejor de los errores y las caídas-susurró, luego levantó la cabeza, para mirarme nuevamente- No te diré que está bien, ni que estoy de acuerdo...pero...me quedaré a apoyarte y asegurarme de que tus caídas sean lo menos dolorosas posibles, hermanito.

Me sorprendió totalmente ver una pequeña sonrisa en sus labios.

- Te quiero, hermana-y la abracé, me dio unas palmadas y me apartó.

- No te pongas cursi, ni te acostumbres ¿ok? Prometí ser fuerte, y eso seré...anda, ya no hagas esperar a tu zorra loca.

- Claro-reí y di media vuelta, dirigiéndome a la salida.

- Christian-voltee la cabeza- No dejes que ella te cambie...ni ella ni nadie, se tú mismo...porque, te juro, un día, podrás tener las mismas libertades que un hetero siendo tú mismo con la persona que amas.

Nos sonreímos y asentí, para luego retirarme y caminar lentamente al auto, pensando en lo recién ocurrido.

Solamente amigos. [Yaoi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora