Criminal [JohnYu]

Chapter 1

Los padres de Johnny, a pesar de su mala situación económica, amaban los lujos. Entre ellos, los viajes, las drogas y el juego. Esa era la razón por la cual Johnny siempre era el último niño en irse a casa después de la guardería e incluso se olvidaban de él, el único de sus amigos sin regalos de Navidad, y en múltiples ocasiones, con solo tres años, fue expulsado de clase por desprender un olor a tabaco poco normal en niños de su edad.

La situación empeoró con el nacimiento de su hermano pequeño Mark. Cuando Mark tenía a penas dos semanas, sus padres decidieron abandonarlos a su suerte en la ciudad de Nueva York, en el Bronx, dejando a un Johnny de cuatro años con su hermano en brazos y muchas dudas en la cabeza.

-¡Mamá! ¿Mamá, dónde vas?-a medida que sus padres se alejaban, las risas de éstos se difuminaban, a la vez que los gritos de Johnny aumentaban.-¡Papá! ¡Vuelve!

Al ver que sus padres le hacían caso omiso a sus llamadas, Johnny cargó a Mark en sus brazos y comenzó a correr detrás de sus padres, pero debido al peso de Mark no logró alcanzarlos. Entre todo el ajetreo, Mark estalló en llanto, seguido por Johnny.

Al oscurecer, cada minuto que pasaba era más frío, y el nudo en el estómago de Johnny aumentaba, pero no podía quedarse sin hacer nada durante mucho tiempo. El cielo comenzaba a cubrirse con nubes que anunciaban una tormenta, por lo que Johnny decidió coger a su hermano en brazos y se encaminó a buscar un lugar donde resguardarse de la lluvia. Después de media hora andando encontraron un pequeño garaje abandonado y decidieron entrar. Una vez dentro, Johnny recostó a Mark, lo cubrió y cuando el menor cayó dormido, se dirigió a paso ligero hacia una tienda de fruta que había en la esquina más cercana. Al percatarse de que el propietario había salido entró por la pequeña ventanilla y cogió un poco de comida con rapidez; pero su sorpresa al salir fue que el propietario se encontraba con un par de policías. Él empezó a correr pero el señor lo cogió por la camiseta. Johnny asustado empezó a llorar.

-¡No porfavor, mi hermano pequeño tiene hambre y necesita ayuda!

El policía al escuchar eso golpeó el hombro del hombre y cogió a Johnny de la mano, pidiéndole que lo llevara a donde se encontraba Mark. Al llegar al garaje Johnny corrió y cogió a Mark mostrándoselo al policia. Éste, preocupado preguntó por sus padres y Johnny agachó la cabeza.

-Ellos se fueron juntos, los vi desaparecer, pero seguro que vuelven a buscarnos.

La voz de Johnny sonaba esperanzada pero el rostro del policía no decía lo mismo. Éste los subió a su coche y se los llevó al orfanato más cercano donde tomaron sus datos personales y acto seguido los lavaron, les proporcionaron ropa limpia y los alimentaron.

Ese fue el comienzo de su nueva vida.