DÍA 1

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Hoy estaba todo tan normal, estaba con mis amigas y amigos para subirme al bus porque íbamos a una excursión con todo el curso, me sonreíste y yo te saludé; nunca imaginé que hoy cambiaría todo, nos subimos en el mismo bus pero con personas diferente. Hicimos la primera parada y tú te pasaste y te sentaste a mi lado, fuimos conversando hasta que me dijiste que yo te gustaba, me besaste, te aparté porque no sabía qué hacer, pasaron unos minutos y volviste a besarme, te volví a apartar porque estaba confundida; hice que un amigo se cambiará a mi puesto y yo me fui con una amiga, le conté lo que pasó y no podía creerlo. Nos bajamos del bus y tú no me dijiste nada, yo estaba con mi grupo y tú con el tuyo, no hicimos el más mínimo intento de que nuestras miradas se cruzaran; supuse que te enojaste porque no te correspondí el beso, así que lo dejé pasar. Cuando íbamos de regreso me cambié de bus porque necesitaba quedarme con algunas chicas que vivían cerca porque si no me iba a perder; en todo el camino fui conversando con un chico que era súper agradable, hablamos de música, de nuestra familia y de nuestros gustos; lo que nunca voy a olvidar de él es que no quiso que la conversación acabara y me preguntó si comía pan, eso fue lo más gracioso que alguien pudo haberme dicho. Al llegar a mi parada me bajé con las otras chicas y nos subimos a una camioneta para llegar más rápido, en el camino me llegó un mensaje tuyo que decía: "¿La suerte de vivir cerca no? Espero que llegues bien", sonreí como una tonta porque pensé que te importaba, llegué a mi casa, me bañé y me dormí, fue un día muy cansado y tenía clases al día siguiente...

15 Días Para OlvidarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora