Confesiones Eróticas

Capitulo 3-. Solo yo

Sus manos no dejaban ni por un segundo mi cuerpo sus labios sobre los míos se volvían más exigentes, su piel erizaba con mi tacto. Mi cuerpo topo con algo blando cuando abrí mis ojos me tenía recargada contra el respaldo de sofá sus manos bajaron a mis nalgas apretando me contra el

-Ha- sentí el ardor en mis nalgas del cachete que me acababa de dar, mis manos tomaron cada lado sus rostro viéndonos fijamente mientras el me sentaba sobre el sofá se colocó entre mis piernas sin quitar sus ojos de mi.

-Te ves tan sexy... - rozo mis labios sentí su aliento sobre ellos mi cuerpo se estremeció y yo me humedecí, lentamente sus labios llegaron la lóbulo de mi oído- ¿Sabes cuánto espere por ti?

Sin dejarme tiempo de contestar lo sentí dentro de mí, el cuerpo actuó juntando nuestras caderas mientras mi espalda se arqueaba de placer, sus movimientos eran lentes entraba y salía despacio haciéndome caso omiso al pedirle mas.

-Tranquila chiquita deja disfrutarte- sus manos en un acto posesivo tomaron mi cara- ¿Te gusta?

Solo asentí no salían mas que gemimos de mi, era demasiado el placer de tenerlo dentro, mis ojos se cerraron y mis manos fueron directo a mis senos pellizcándolos mis pezones, de pronto paro sentí como se alejaba de mi, un ves que volvía para míralo movía su cabeza diciendo que no mientras sus manos se cruzaban sobre su pecho.

-¿Por qué paras?

-Te dije que esta noche te iba a disfrutar, eso implica que solo yo te puedo tocar- estaba muda, baje mis manos colocándolas a cada lado de mi cuerpo abriendo mis pierna para él, observe como recorrió mi cuerpo con su mirada; como su expresión de antes desapareció por una sonrisa de medio lado mientras se situaba entre mis piernas– Así está mejor pequeña- coloco una mano sobre mi oído enredándose en mi cabello y tiro de el para que lo mira sin decir nada me beso.

Nuestros labios fueren devorados mutuamente poco a poco mis manos fueron cobrando confían acariciando sus brazos, sus espala y llegando hasta su trasero aparentándolo a mí, en ese instante sentí cono sus labios formaron una sonrisa sobre los míos.

-¿Tanto lo quieres sentir dentro de ti?- sentía como sus labios rozaban ligeramente los míos sin abrir los ojos le dije que si. Un suspiro ahogado se disparó de mi ser -Relájate chiquita esto va a ser lento.

Y así fue sentía como entraba y salía de mi con toda la calma aun asi se sentía delicioso como se deslizaba por mi como con toda calma acariciaba mi cuerpo me deje llevar como me había pedio mi cuerpo excitado sentía al doble cada rozo me eriza me hacía querer más de él y al mismo tiempo no quería que cambiara su velocidad, recargue mi cabeza cobreo la curva de su cuello mordiendo ligeramente la zona, pasando mi lengua cerca de su oído gimiendo muy cerca de el.

De un momento a otro sus movimientos fueron aumentando la velocidad al igual que mis gemidos que pasaron a ser gritos

-Así... así... no pares si- sus movimientos fueron bajando de intensidad junto con su manos que atravesó mi abdomen y se posicionó en mi clítoris haciendo movimientos circulares lentos, salió de mi introduciendo sus dedos en remplazo una vez dentro comenzó a hacer presión hacia arriba sin dejar de mover su pulgar por fuera cada ves mas rápido mientras sus labios torturaban mis senos.

Cuando estaba a punto del orgasmo se separó de mí y susurro en mi oído- ¿Quieres terminar con migo dentro?

Con la voz entre cortada logre decir- Si... por favor- lo volvía besar y sentí como me empujaba para bajarme del respaldo hasta quedar acostada sobre el sofá vi como lo rodeo si dejar de mirarme

-Abre las piernas nena... Bien ahora chúpate el dedo lento- lo pensé por un momento me daba un poco de pena hacerlo frente a el, pero por otro lado quería complacerlo fui despacio llevando mi dedo a los labios solo rozándolos el se hinco entre mis pierna colocando sus manos en mi cintura inclinándose hacia mi y con la punta de su lengua paso por el dorso de mi dedo –Mételo y chúpalo nena. - obedecí mientras sentía como oprimía mi cintura cada ves mas

-No dejes de mirarme pon ese dedo en tu vagina y tócate para mí- sabía que sus mano iban a dejar una marca en mi pero no me importo me estaba haciendo desearlo cada ves mas así que hice lo que me pido mientras el me observaba atentamente decidí cerrar mis ojos y dejarme llevar.

Sentía como mi cuerpo estaba a punto de terminar en un gran orgasmo y como sus manos ya no estaban sobre mí, abrí mis ojos lo vi acariciar su miembro sin dejar de verme los cual me excitó mas y termine por llegar mientras mis piernas seguían teniendo espasmo igual que mi vagina. Sentí algo caliente sobre mi abdomen se había venido en mi lo tome de la cara y lo lleve a mi pecho, sus manos acariciando mis muslos repartiendo besos sobre mis senos y mordisqueando mis pezones. Mi respiración aun no era regular cuando lo sentí dentro de mi otras estaba ves mas rápido y rudo que la última ves, cuan reaccione mis manos estaba arriba de mi cabeza sujetadas por las suyas tenía los ojos cerrados y lo escuchada gemir de pacer envolví mis piernas sobre su cadera para sentirlo mas moviendo la mia junto con el

-No sabes lo rico que paritas sigue asi déjame seco chiquita- una vez dicho eso me jalo para quedar a horcajadas sobre el volvió a tomar mis manos llevándolas a mis espalda, comenzó a penetrarme rápido y sin cuidado alguno dando ocasionales nalgadas con su mano libre mordiendo mis pechos y cuello.

-¿Te gusta mi verga dentro de ti?- solo moví mi cabeza pero no quedo conforme con esa respuesta me dio una nalga y paro- Si te gusta me lo tienes que pedir.

Trate de sentarme en el momento lo mire a los ojos y roso sus labios con mi senos acercando mis labios a su oído chupe su lóbulo- Me encanta... puedes darme más por favor... ¡Duro!- le di pequeños bese entre cada palabra y termine mordisqueando su lóbulo justo en ese momento volvió a tomar su ritmo se sentía tan bien, tan duro ,tan dentro que no podía parar de gemir

-Más... mas... dame más-

-Te lo voy a dar pero ponte cuatro para mí, quiero ver esas nalgas hermosas que tienes.

Me bajo de su regazo y sin pensarlo me puse como él quería tena mis manos recargadas en el respaldo. Sentía como acariciaba desde mi cintura a mis muslos internos cono su boca saboreaba mi espalda me dio con su mano sobre las nalgas sentí el ardor rico de las nalgadas voltea par mimarlo

-¿Me das más por favor? – mordí mis labio y con mi mano acaricié mis nalgas despacio sin pensarlo ni contestar volvió a entrar en mi tomando mi codeara para acercarme mas.

-Nena... que rica estas... me tienes como loco- con sus labios cerca de mi odio me dijo- muévete para mí-

Comencé a mover mi cadera en círculos sobre el sentía su miembro ponerse mas duro dentro de mi-

-Así... si no pares... que bien lo haces gatita- me tomo por los codos y me llevo a su pecho una ves ahí coloco un amono sobre mi senos y la otra entre mis pierna

-Ha... si! Por favor no dejes de tócame... mas

-Te gusta muévete mas, cógeme chiquita

Sus palabras y movimientos me llevaron al orgasmos mas extenso de la noche con tres envestidas mas sentí como se derramo dentro de mi saliendo y como su liquido corrió por mis mulsos aun sensibles me deje caer en el sillón cerrando mis ojos.

Nunca había sentí algo así, fue el mejor sexo de mi vida sin duda alguna. Cuando volvía a mi sentí cómo acariciaba mi espalda si decir nada me llevo otra ves a su regado y dándome besos en frente me quede dormida está agotada.

Continuara...