10;

266 17 1
                                    

Querido Carlos:

¿Por qué no puedo sacarte de mi cabeza? Cada vez es mas difícil ver tu mano sosteniendo la suya casualmente, mientras yo estoy al otro lado queriendo ocupar su puesto. Para ya, sal de mi cabeza.

Atentamente, N.

Notas para él.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora