Louis.
Todo se fue a la mierda. Dejé salir todo lo que sentía. Esto no estaba en mis planes. Traería muchos problemas.
No encontraba mis malditos botines.
Busque por todo el vestidor pero no estaban.
Salí de ahí y vi a Harry jugando con su rulos. Era tan tierno y frágil.
-Eres hermoso- me miró y sonrió haciendo que sus hoyuelos se noten.
-¿Estas listo?- se acercó a mi, con esa sonrisa perfecta.
-Tengo que buscar mis botines y saldremos- acaricie su rostro y deje un beso en sus labios.
-Louis... esto no esta bien- bajo la mirada.
-¿Por qué?- aún bajaba la mirada.
-No se quien eres. Es decir, no se nada de ti. Solo tu nombre y conosco a tu familia pero nada más. No puedo enamorarme de alguien que no se quien es- tenía razón, no conocía nada de mi.
-Esta vez tienes razón. Pero es hora de entrenar. Tengo que buscar los malditos botines- me alejé y revise debajo de la cama.
-¿Te refieres a esos que están en la entrada?
-Si esos. Lo había olvidado soy un idiota.
-¿Donde estaré?- su voz era más grave que la mía, pero seguía siendo delicada y hermosa.
-En los bancos o en la tribuna. Eso depende de ti- termine de colocarme los botines y salimos hacia la cancha que había detrás de la escuela. Era demasiado grande.
-Todo de este Instituto me deja sin palabras- estaba sorprendido por el lugar que había.
-Genial, ya empezaron sin mi- agarré su mano y fuimos con ellos.
-Son unos malos amigos- dije cuando estábamos cerca.
-Sabes que tenemos un partido mañana, no podemos perder tiempo- dijo el entrenador.
-Perdón a todos. No volverá a pasar- acerque a Harry - ¿puede quedarse en el banco de suplentes o en la tribuna?
-Sabes que no puede venir- miró a Harry y asintio- solo está vez Louis, pero que no se repita.
-Gracias- camine un poco con Harry hasta llevarlo a los asientos - Quédate aquí no tardará mucho solo es media hora- estaba por dejar un beso pero tenía miedo de que nos vieran.
-No soy un niño, se que debo hacer- se veía más lindo enojado.
-Te ves hermoso así.
-¡¡Vamos Louis, perdemos tiempo!!- gritó el entrenador.
Fui corriendo hasta ellos.
-Bien haremos un pequeño partido.
Como somos 22 serán dos equipos.
Las estrellas se dividirán. Louis y Liam en uno y Zayn con Michael en el otro.
Liam no pasaba la pelota y hacia juegos estúpidos.
-¡¿Qué te sucede?! ¡¡Pasa la puta pelota a los demás!!- me acerqué a él y lo empuje. Me tenia cansado con sus estupideces.
-¡Hey Louis! Tranquilos por favor- intentaba calmar la furia que sentía pero no ayudaba -Liam quedas fuera, ve a descansar y piensa lo que haces.
Era un idiota. Odiaba cuando actuaba de esa manera.
-No es justo, necesito entrenar.
-Eso debías haberlo pensado antes de hacer estupideces- Contestó el entrenador, señalando el lugar.
