Capitulo 3

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Narra Alessia:

Ya estaba dentro de la casa de Davon, y gracias a las pelotas del grandioso Justin Bieber, el padre de Davon no estaba, fue un alivio tan grande que olvide que andaba en pijamas. Pasamos y salude a mi suegrita, claro que no le decía suegrita en su cara, pues porque aun no me siento cómoda. Ella me miro extraña y yo solo sonreí, mi sonrisa calló cuando me mire, y vi mi atuendo NO.ES.POSIBLE ¡En que demonios pensaba! ¡Todo es culpa de Davon! Ahora mi suegrita pensará que soy una vagabunda que duerme en las calles y va a visitar a su novio porque no tiene mas ropa! O seguro que soy una puerca que no lava su ropa y no lo queda de otra que usar sus pijamas para salir! Por mi mente pasaba todo tipo de cosas, la sangre subió a mis mejillas a mas no poder, creí que se enojaría, o le reclamaría a Davon por tener una novia tan vagabunda. Yo no permitiría que ella me reclamara por algo que su hijo causó, así que me adelante a hablar.

-Pues.. Se que me mira extraña por mi atuendo. Cierto?- Yo pretendía parecer muy segura al hablar. No permitiría desfallecer frente a la madre de mi novio. No cuando ella sabe que soy una chica segura. O bueno, eso hago que piense la gente, pero me hace sentir bien que me vean segura de mi misma.

-Ehm.. Bueno.. De verdad estoy intrigada Alessia, cuentame porque andas en pijama cuando ya van a ser las 3 de la tarde.- Ella responde muy amable, se que no pareciera amable, pero lo es, ella es una persona muy dulce, solo que tiene algunas reglas, y un buen carácter.

Yo estaba nerviosa, pero al recordar el motivo por el cual soy un asco y que no es mi culpa, se dibujo una sonrisa en mi rostro. Una sonrisa que oculta cierta malicia y venganza hacia Davon.

-Disculpe, señora Cristina, es una historia un poco rara, pero le aseguro que cuando le cuente no seguirá mirandome extraña. Y se dirigirá a otra persona.- Ella se dio cuenta que me referia a Davon, y elevo un poco su cabeza para mirar sobre mis hombros, ya que yo estaba frente a ella aun al pie de la puerta, pero claro, estábamos dentro de la casa.
Davon estaba en la cocina y  cuando escuchó lo que dije en esa forma desafiante el trató de escabullirse a las escalera directo a su habitación. Mi suegrita lo vio y hizo que volviera a la sala.
El creía que me llevaría un regaño de su madre y yo lo escuchaba riéndose en la cocina mientras mi suegrita me hablaba. Pero le salio mal la jugada y yo aproveche para hacer el Jaque Mate.

-Davon, podrías explicarme porque permites que Alessia ande así por la calle solo para venir a verte?.- Bingo! Que buena jugada suegrita.
A Davon se le dibujo una linea recta en sus labios. Yo quería reír pero debía dar la impresión de estar dolida.

-Mamá, por favor, no pienses que yo hago que Alessia venga a la fuerza y que no le de tiempo de cambiarse, solo que ella le daba flojera vestirse.- Oh no! Que ni se le ocurra jugar tan sucio!. Aquí voy, no le permitiré hacerme quedar mal. Además, el es su hijo y lo perdonaría mas rápido.

-Eso cree señora Cristina? Y que tal si le digo que yo estaba durmiendo tranquilamente después de ayudar a mi madre con la casa y recibí una llamada de su hijo y no dejó que me cambiara y me subió a sus hombros, y me trajo hasta aquí en pijamas.- Boom! Ahí tienes pequeño mentiroso! Bueno, al menos yo si estaba diciendo la verdad.

-Es en serio Davon? Como le haces eso a Alessia, por dios hijo, que vergüenza, que pensara la gente que los haya visto, pensaran que mi hijo estaba secuestrando a alguien!. Porque eres tan bruto? Si no querías que Alessia se cambiará pudiste haberte quedado en su casa. Hijo de donde sacas tantas locuras?.- Yo quería estallar de risa por la cara de Davon, porque el también quería reír. Así que solo se resigno y pensó por un momento. Mi suegrita tenia razón, como tuvo un hijo tan bruto? Pero a mi me gustaba su hijo, y mucho.

-Esta bien mamá, tranquila, tampoco es que las personas la reconocieron. No ves que no se peina y su cabello tapa su cara?.- Yo le eche una mirada matadora. Su madre me vio, sonrió, volteo los ojos y se fue. Creó que se dio cuenta que somos unos casos perdidos.

Davon y yo pasamos la tarde en la sala de su casa viendo películas y comiendo pizza como unos puercos que somos. Por eso nos llevamos tan bien.

Narra Davon:

No puedo creer que esta chica me tolere tanto, después de ser un completo idiota con mis bromas de mal gusto y mis ocurrencias.
Ella estaba sentada justo a mi lado, con su cabello un poco despeinado, se que exagere cuando dije que no se peinaba y que su cabello tapaba su cara, pero me gusta ver cuando se enoja. Tenia su cabeza recostada en mi hombro, yo tenía mi brazo justo detrás de su espalda y mi mano posada en su cintura. Me encantan estos momentos, claro que no se lo digo para no ser cursi, hay veces que no lo puedo evitar, pero a ella le gusta. Estábamos viendo una película de terror, ya que a ella les encantan esas cosas, a mi también me gustan claro, ya que si no me gustaban no la estaríamos viendo, porque si no me gusta algo no lo hago y ya, así soy, así de simple. Vi el reloj de la pared y ya eran las 7:30pm y recordé la fiesta, me removí en el mueble y ella igual. No había notado que estaba dormida, si lo hubiera hecho ni asistiríamos a esa fiesta, me hubiera gustado verla dormir toda la noche junto a mi. Pero ya lo había arruinado. Idiota. Ella me miro y habló

-Davon, a que hora es la fiesta?- Su voz sonaba mas ronca de lo normal.

-Dentro de 30 minutos.- Dije tocando su cabello.
Se acomodo por completo y se sentó.

-Y que haces que no me despertabas y tu no te mueves?.-

-Pues porque crees que despertaste? Ya vamos a arreglarnos.- De verdad se me habían quitado las ganas de ir, pero no le podía quedar mal a Logan.

Ella tomo una camisa que le di para que pudiera ir a su casa a arreglarse. La acompañe hasta la puerta y le dije que la esperaba a las 8 aqui en la casa. Ya que Julio, un buen amigo mio, pasaría a recogernos.
Yo fui a mi habitación a darme una ducha corta.
Al terminar la ducha me coloque mis boxers Calvin Klein, tome mis jeans oscuros, unas supras negras sencillas, mi franela gris y mi chaqueta de cuero. En las fiestas de noche nunca puede faltarme esa chaqueta. Trate de peinarme pero termino mal, nunca me se peinar bien, pero termino alborotanto mi cabello y luce mejor. Me coloque perfume, recordé que Alessia maná ese perfume y sonreí.
Ya estaba bajando las escaleras y cúando le iba a marcar a Alessia, sonó el timbre y supe que era ella.
Estaba hermosa cuando la vi.
Tenía en cabello en ondas, sus pantalones de cuero negro, unas botas cortas de tacón, una blusa blanca y la chaqueta negra que no le puede faltar.
Nos miramos y sonreímos parece que nos fueramos puesto de acuerdo.

-Me estabas espiando para saber que usar?.- Dijo ella algo burlona.

-Ja! Eso digo yo.- Le sonreí.

Se me quedo mirando por tanto rato que no pude evitar hablarle:

-Disfrutando de la vista?.-

-Quisieras!.- Bufo y luego sonrió.

La pegue a mi y le dije:

-¿Lista para esa fiesta?.-

-Claro que si.

Sono la bocina de un auto y supe que Julio ya había llegado.

Una Pareja de Locos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora