Adrenalina pura baña las corrientes calurosas que transitan las desoladas calles, toda la gente en la feria seguía festejando, comprando y riendo ignorando otro suceso aún más increíble, en la calle, Leia de pie sobre el abollado auto sonreía siniestra con la cabellera agitándose, imponente frente a la luz del sol, esta dijo emocionada:
-Ho vaya, jamás pensé que tendría que vérmelas con la justicia misma, entonces señor policía…
Sheridan impresionado la veía sentado dentro del auto, la joven le dijo:
-¿Piensas tratar de arrestarme o quizá…ignorar esto que paso?
Madao lagrimeando pensaba: “Leia…sabía que ella podría escucharme, gracias a dios llego” le grito desde la parte trasera:
-¡Leiaaa, estamos aquí sálvanos, estos sujetos…no creo que sean policías!-¡¿Qué, que, acaso dudas de nuestras medallas?! ¡Jodido criminal!-le reprocho Sheridan de reojo.
Airia quitando la frente del volante chisto adolorida diciendo:
-Ouch ouch, mi cabeza ha probado el volante con todo…¿Qué sucedió?
Mirando se sorprendió al ver a Leia de pie sobre el auto, grito pálida:
-¡¿Pero qué demonios, quien es esa tipa, acaso…nos cayó de arriba?!
Leia se inclinó mirando a través del espejo roto viendo a los tres jóvenes atrás, Madao le chillo esposado en multas:
-¡Sácanos de aquí Leia, por favor, creo que son secuestradores!
Toshiki y Haruki le chillaron mudos y ojiabiertos, la joven poniéndose la mano abierta sobre sus ojos exclamo tonta:
-Ho puedo verlos aunque están un poco lejos-¡Deja de bromear y solo sácanos!-le grito Madao.-Entendido-asintió con cara de nada.
Se bajó del auto abollado que era mirado por el boquiabierto Sheridan, caminando arranco la puerta del auto bajando a Toshiki del brazo, Airia sorprendida grito:
-¡¿Pero qué crees que estás haciendo?! ¡Hey Sheridan, se lleva a los presos!
Extrañada miro a Sheridan que lagrimeaba abrumado, al acto se lanzó a la calle retorciéndose gritando:
-¡Nuaaagg, ¿Por qué, porque tuvo que pasar esto?! ¡Él era muy joven para morir!-¡¿Pero qué mierda te agarro ahora?!-le reprocho Airia.
El joven levantándose acaricio al capo destrozado, lagrimeando dijo triste:
-Hooo, Roberto, eras tan bueno con nosotros, llevándonos a todos lados, ahorrándonos tantas caminatas, ¡no merecías ser pisado así!-¡Deja de hablar con el auto como si fuera una persona, ¿he, espera, desde cuando le pusiste nombre?!-le grito Airia con dientes de sierra.
Atrás Leia agarro del brazo a Madao que le dijo feliz:
-Leia, viniste…-Para eso me llamabas, ¿no?-le dijo seria.-Si pero…¿Cómo hiciste para oírnos de tan lejos?-pregunto intrigado-Nunca subestimes el oído de un Raikeshi, ahora baja-dijo Leia guiñándole un ojo.
Airia impactada vio como descendía Madao, apretando sus dientes dijo:
-Entiendo que sean chicos inocentes pero…¿Qué nos los saques delante de nuestras narices?-¡No me tomes el pelo!-dijo irritada.
Bajándose del auto apunto con su pistola a Leia ordenándole mandante:
-¡Hey tu zorra aplasta coches, levanta las manos donde pueda verlas, ahora!
Madao chillando junto con Toshiki se pusieron detrás de Leia, el chico grito:
-¡Tiene un arma y está apuntando, Leia ten cuidado!-Descuida, solo es una pistola-dijo Leia despistada sacándose cera del oído.