Ewah 《ChanBaek/BaekYeol》

Espiral dos

— Nunca creí decirlo, pero qué vergüenza ser tu amigo...

— Una más y te cumplo la leyenda de los binoculares del instituto, cabrón[1].

— En serio, Chanyeol... ¿Ya me puedes decir si fue verdad o mentira?

La pelea había finalizado, y fue algo sumamente emocionante... si no te llamabas como cierta persona de penosa derrota. Jongin llegó a la final pero no ganó, Do Kyungsoo perdió en la semifinal, Baekhyun iba a competir contra un tal Zhang Yixing pero resulta que recibió una misión de urgencia. Tuvo que marcharse del evento, perdió por abandono y Zhang pasó a la final por default. No fue problema, de cualquier modo ya tenía su lugar como miembro de primer nivel en la pandilla, y Yunho quedó tan embelesado por él que hasta le deseo suerte y le hizo prometer que volvería "sano y salvo" para la fiesta de relevo.

Y él... no, ni siquiera quería recordarlo. Bebería como loco el resto de la noche para despertar y creer que fue una pesadilla de mal gusto; sí, eso haría. Y si corría con suerte, fallecería de un coma etílico. Sí, excelente plan.

En fin, ¿y quién entonces había quedado como el nuevo Semyazza? El tal Luhan. A todo esto, Chanyeol no sabía que le enojaba más; haber perdido por tan estúpido descuido o que ese tal Luhan hubiese ganado. La final fue extraña, demasiado. Era tan evidente que el tipo no estaba peleando con interés. Hablaría seriamente con Jongin porque «¿qué mierda le ocurrió?» Y lo peor de todo... es que Yunho, Jaejoong y Taeyang validaron el triunfo. ¿Tanto querían a ese tipo? «¿No que yo era tu favorito, Yunho? Maldito hyung infiel...»

— ¡Ey, Luhan hyung! ¡Felicidades por tu victoria! Me alegra mucho que seas el nuevo Semyazza.

El aludido tras cruzar la salida de la bodega y llegar a aquel callejón, volvió el rostro hacia el lugar proveniente de aquella voz. Sonrió al notar que se trataba de Jongin y se acercó a ellos a paso relajado. Chanyeol también giró el rostro a su compañero, pero para brindarle una hermosa expresión de «¿es en serio, pendejo?».

— Gracias, supongo... No fue nada agradable pelear contra ti, Jong. ¿Tu brazo está mejor?

— ¿Te parece gracioso? —Chanyeol cortó la conversación, sin ánimos de pretender que la situación estaba bien.

Cuando Luhan se percató que aquello había sido para él, posó sus ojos en el de mayor estatura, alzando una de sus cejas con gesto serio. ¿En verdad que esa cara de Barbie iba a ser su jefe? Y pensaba que la única niña con pene en la pandilla sería Baekhyun, que por cierto, parecía no tener cargo de conciencia alguno por haberlo estrellado contra el piso, más bien entretenido en charlar alegremente con el reservado Kyungsoo mientras comía de una bolsa de gomitas que Jongin con frecuencia le robaba y Chanyeol lo cargaba en su espalda.

«¿Y por qué lo estoy cargando?». Chanyeol soltó los muslos de Baekhyun y éste regresó un poco extrañado al suelo.

— Me parece gracioso ¿qué? —El rubio preguntó inclinando con ligereza la cabeza.

— Tsk... No te hagas idiota, Luhwang.

— Es Luhan.

— Como sea, porcelanita china. ¿Te divirtió que Kyungsoo y Jongin te dejasen ganar?

El moreno explayó sus ojos al escuchar aquello y se giró a su amigo con la intención de interferir, pero Kyungsoo, extrañamente, se adelantó.

— En realidad... Luhan hyung pelea muy bien —musitó el más bajo de todos con pesar que hubiese querido no hacer notorio, agachando la cabeza con cierta pena.