Mamá no estaba, no había rastro de ella, ni de ella ni de la comida que debía estar preparada...
—¿Dónde está mamá?—me preguntó Alex con cara de preocupación.
—No lo sé, pero volverá pronto, tú tranquilo—le contesté para que se tranquilizara, pero comenzó a llorar.No volvía, no sabíamos que había pasado con ella, no dejó ni una nota...
Estuvimos esperando su regreso, pasando hambre. Nuestra madre había cumplido, había puesto un candado en el frigorífico para que no pudiéramos abrirlo.
Pasamos la tarde tirados en el sofá, no teníamos fuerzas porque no habíamos comido nada durante el día, Alex estaba pasándolo peor que yo.
—Por favor, mamá tiene que volver...—repetía una y otra vez, como si estuviese rezando.Cuando oscureció escuchamos unos pasos sobre las hojas secas que estaban alrededor de la casa. Cerca de la puerta.
Me asomé para ver si era mamá. No estaba seguro de lo que estaba viendo, la luz de nuestra casa no dejaba ver el rostro de la persona que estaba delante de la casa, pero no parecía mamá, era una señora y daba mucho miedo, parecía vigilar nuestra casa...
—Alex apaga todas las luces—le dije flojo.Alex apagó todas las luces y así pudimos observar bien el rostro de la señora, pero cuando me giré a ver quién era ya no estaba, había desaparecido, de un segundo para otro... Todo comenzaba a ser demasiado extraño, ¿dónde estaba nuestra madre?
No sabíamos qué hacer, no podíamos hacer nada. Buscarla sería demasiado peligroso, el bosque era el lugar más peligroso que existía... Y no podíamos entrar al fondo del bosque, era el peor lugar que existía, o eso decía mamá.
No podíamos hacer nada, lo teníamos claro. Nos tumbamos a dormir y al día siguiente lo diríamos en el colegio para ver si nos podían ayudar.
Cuando salimos del colegio, la profesora nos dijo que fuéramos a casa y si seguía sin aparecer llamáramos al número que nos había apuntado en la agenda.De camino a casa, fuimos por el camino largo, era mucho más bonito y necesitábamos cosas positivas...
—¡Mira Gabriel!—señalaba Alex.
Había una avioneta amarilla volando cerca de nosotros, estaba muy nueva y era muy bonita.
Nos quedamos observándola un rato, viendo como giraba hacia los lados alrededor de algunos árboles que eran muy altos.
Y de repente, comenzaba a escucharse un ruido muy extraño que salía de su motor, como si algo estuviera roto... Y pasó, la avioneta chocó y cayó al suelo cerca de nosotros.
Alex y yo fuimos corriendo hacia la avioneta. Dentro había un señor, tenía una herida en la cabeza pero se le veía bien.
—Señor, ¿está bien?—le preguntaba Alex.
—Sí, muchas gracias—respondía el señor.
Le ayudamos a salir de la avioneta y le dimos un poco de agua que teníamos en la mochila. La profesora nos había dado el almuerzo ese día.
—Muchas gracias por ayudarme, chicos. ¡De verdad!—nos decía muy feliz.
—No es nada señor, mejórese—le decía.
—Por haberme ayudado tanto os dejaré que vengas a dar una vuelta conmigo cuando tenga la avioneta en condiciones—nos decía.
—Muchas gracias señor, vaya a descansar—le dije—¡Hasta otra!Nos fuimos a casa corriendo para ver si estaba mamá y para contarle lo que había pasado.
Cuando llegamos mamá estaba en casa, ¡la comida estaba hecha y ella estaba ahí!
Cuando la miramos vimos que tenía heridas en la cara, pero nos daba miedo preguntarle qué le había pasado.
—Mamá, ¿dónde estabas?—preguntó Alex.
—¿Qué pasa? Pensaba que sabíais cuidaos solos...—dijo con mala hostia.
—Sabemos, pero no sabemos abrir una nevera que lleva un candado.
—¡Sólo me queréis para que os haga la maldita comida, estoy harta de vosotros!—gritaba.
—Te queremos, pero si no estás y tenemos hambre...—decía Alex llorando.
—¡Venga a comer!Comimos y tras ello nos sentamos en el sofá, mamá se encargó de limpiar los platos, supusimos que se sentía mal por habernos dejado solos...
¿Qué le había pasado a mamá?, ¿Dónde estaba?, ¿Y por qué tenía heridas?...
Le había pasado algo malo, le habían hecho daño y nosotros nunca lo sabríamos... Yo. Alex era demasiado pequeño para deber enterarse de algo así...
Tenía que saber lo que le había pasado a mamá...
¿Le habría pegado la mujer que había visto la noche anterior?, ¿tendría esa señora algo que ver en todo esto?
ESTÁS LEYENDO
NO CONFÍES
Mystery / ThrillerAlex y Gabriel viven en una casa de bosque, tienen una vida muy normal, hasta que un día a la vuelta del colegio viven un gran accidente, un accidente que cambiará sus vidas completamente. Portada creada por phantomWings