Pasado oscuro

Toda historia tiene un comienzo

Capituló 1

Era una noche fría, de inmensa oscuridad, las estrellas se habían escondido dejando a la luna brillar, pero no estaba sola, también estaba su reflejo en él mar y ahí se encontraba la protagonista llorando sola en la orilla del mar. La brisa del aire movía su media melena color chocolate, y sus ojos marrones café se escondían detrás de sus manos. Se escucha de vez en cuando un coche pasar pero aunque pasaban horas ella no se movía del lugar hasta que de repente una mano poso en su hombro y al girarse vio a su mejor amiga diciéndola "Todo va a salir bien" con una sonrisa de medio lado mientras tragaba saliva y cerraba fuertemente los ojos evitando llorar. Y la verdad que hemos empezado por él final, seguir leyendo la historia que seguro os va a gustar.

Esta historia no es de amores a primera vista.

Ni de parejas perfectas como en las películas de amor que solo duran dos horas.

Esta historia trata de un amor loco y es que solo los locamente enamorados podemos decir que es él amor, por que solo sabemos amar locamente. Como nuestras dos protagonistas que son mejores amigas.

Anabella mas conocida como Ana es de piel morena, de ojos color oscuros, tiene media melena de color rubio oscuro, de estatura mediana y delgada, es muy impulsiva y cariñosa aunque a veces llega a ser muy borde, es muy directa y siempre dirá todo lo que piensa sea bueno o malo, pero si necesitas ayuda ella será la primera en estar a tu lado por eso quizás se aprovecharon de ella...

Jasmine es de piel blanquita, sus ojos son de color marrones oscuros, tiene él pelo largo y de color castaño, su estatura es mediana y delgada, es muy noble y cariñosa, siempre esta sonriendo aún que lleve un mal día, es tímida pero lo da todo por todos quizás ese sea él error que ella cometía...

Como todas las mejores amigas tienen él sueño de vivir ambas juntas, siendo compañeras de piso, ellas habían cumplido ese mismo sueño. Anabella era propietaria de su propio negocio, y no de un negocio cualquiera, era la dueña del famoso restaurante que tantos trofeos había conseguido, por su excelente comida. Eso no solo la hacia ganar mucho dinero, también la hacia ser la envidia de muchos comercios de la zona y ya sabemos que la envidia hace sacar lo peor de cada uno, en cambio, Jasmine trabajaba como empleada en una peluquería humilde. Pasaban mucho tiempo las dos juntas, eran como hermanas aun que no se parecían en nada, por eso mucha gente se extrañó cuando esa amistad se empezó a quebrar dejándose hasta de hablar pero todavía queda mucho por saber él por que sucedió. Ambas dormían en la misma habitación pero en camas separadas, la habitación era color verde esperanza que era lo ultimo que se pierde y hasta eso casi lo perdieron en esta historia, pero basta de "spoilers" y comencemos a contar aquella historia que no parecía tener un buen final.

La luz empezaba a entrar por la ventana de la habitación, ya había amanecido. Empezó a sonar el despertador, como de costumbre indicando como otro día mas se tenían que levantar para comenzar trabajar.

-Ana apaga ese ruido infernal-Dijo Jasmine entre ruidos mientras a la vez se quejaba. Su amiga ignoro sus quejas, así que se puso la almohada encima de la cabeza para no escuchar ninguna estrofa de la canción.

-Pero si antes te gustaba esta canción-Dijo Ana apagando la alarma.

Si hace dos años ... ahora cada vez que la escucho la detesto-Dijo Jasmine tapándose entera con su manta de color leopardo.

-Anda levantaré que ahí que ir a trabajar, que luego dices que no te despierto-Dijo Ana mientras piso el suelo con los pies descalzos como de costumbre, pero con el calor que hacia ni el suelo estaba frió, se dirigió hacia la ventana, miro el paisaje sonriendo su reflejo tras el cristal y abrió la ventana de par en par, dejando que corriera esa brisa de aire fresco que tanto amamos en los días calurosos de verano.