El lobo siempre será malo,
si sólo escuchamos a Caperusita.
Las personas son ingenuas, fáciles de engañar, de convencer, se hacen la víctima para recibir consuelos sin sentido y que no merecen, ni muertos, ni agonizando.
Las personas son egoístas, nunca se preocupan por los que están al rededor, no les importa ni un carajo que tengan más problemas en su vida. Siempre van presumiendo, si no es por que tienen la mejor suerte es por que se encontraron una astilla en su dedo.
Siempre haciendo ruido por doquier para que otros los noten y los alaben. Sí, claro, alaben a los humanos, los más inteligentes y fuertes seres que hayan vivido en la tierra. ¡Mentira!
No tienen instintos ni principios, y no hablemos de valores. nos consideran a nosotros como "animales" cuando ellos se dejan llevar por sus estúpidos sentimientos. No piensan claro las cosas, son infieles, arrogantes, egoístas, soberbios, manipulan todo a su antojo para satisfacer sus necesidades, juzgan a los demás con la primera intención, asesinan sin piedad, hieren sin remordimiento, eso si, que no se les ocurra tocar ni el más fino de sus cabellos por que te harán sufrir, ignoran y ponen atención a su conveniencia, tratan a las demás especies como algo basura y con superioridad, engañan, ofenden, aparentan, se disfrazan, son dependientes unos a los otros, atacan para controlar.
¿Porqué debería ser diferente esa estúpida humana? Haciéndose la inocente, tierna y humilde. Já. Pero nosotros bien sabemos que ya tubo en sus manos la sangre inocente de un "animal", puede que él también haya hecho cosas que se lo merecieran, pero necesitaba comida para sus crías recién nacidas, si no, morirían. Ése monstruo le arrebató un padre a sus recién nacidos, ni se molesto en preguntar o dejar verlos. Nada. Nunca los vio, ni una palabra les pudo decir.
Bien, todos tenemos defectos, pero los tenemos por una razón. Nosotros construimos nuestra perfección, por como nos gustaría ser sin afectar a los demás, tener los valores más importantes y que nuestras acciones estén controladas por nuestros principios. Estamos para cambiar con las estaciones, siempre evolucionando y fortaleciendonos.
-Cálmate, deja de asechar y vete- me susurre al ver que me encontraba enfrente de la "cabaña" donde se encontraba la abuelita y que es donde la descendencia de la humana vive. Dirigí mi mirada al sol, ya casi sería medio día y como siempre llegaría tarde con ella.
Soy como aquella rosa negra,
un tanto marchita
pero diferente entre las demás.
Sí, todos podemos tener rencor hacia alguien. Esta en la naturaleza del ser humano, y hay veces en que llega a dominarnos en la mayoría de las veces, terminamos haciendo algo tonto, pero... yo no quiero ser parte de ellos. Me hice amiga del "enemigo". No entiendo porqué dicen que da miedo y que es peligroso estar cerca de él. He estado lo suficientemente cerca y por varias semanas, que le puedo aclarar al pueblo que él, aunque tenga arranques de ira, no es una mala persona, sí, dije persona.
Él no es un animal, su raza no son animales. Ellos son mejores que los propios humanos. Me gane su confianza y... lamento habérmela ganado, no se merece que le oculte la verdad... El porqué de que decidí acercarme a el.
Quisiera que hubiera otra forma, pero me no me gusta ser chismosa, quería escucharlo de él, de su hijo... de la persona que tuvo que pasar por eso. Quería que él me lo dijera, sin importar que me costara la vida.
Hoy le diré la verdad. No me importa si me muero por hacerlo, al menos sabré que ya estará satisfecho.
Deje mi bicicleta en un arbol. Como cada día nos vemos en el bosque, me senté en la misma roca de la ves en que lo conocí. Recuerdo que estaba viendo como las pequeñas y grandes hojas de los árboles caían al río que esta a los pies de la roca y se las llevaba al gran mar.
