— ¿Quieres algo para tomar?
— No, gracias.
— ¿Estás bien? Te veo más serio de lo normal.
— Estoy bien, idiota.
No creo que esté bien, o sí...
— Yoongi.
Murmuré sentándome a su lado, mi mano se posó sobre su rodilla donde subió hasta su muslo y volvió a la principal.
— ¿Acaso estás de mal humor porque no has tenido un buen polvo?
— No seas puto.
Ja.
—Yoongi, ¿quieres que te la chupe?
— ¿Qué? Mira Jungkook, no estoy para bromas.
Reí bajo, no tardé en ponerme de rodillas en el suelo desabrochando su pantalón también.
—Jung...
Separé sus piernas ligeramente para poder estar entre ellas, deslizé el oscuro pantalón dejando al descubierto las pálidas piernas que poseía, prosegui a hacer lo mismo con el bóxer gris, aunque lucía sexy si lo tenía puesto.
Mi lengua salió para lamer el glande, como siempre no quité la mirada de los ojos que me miraban con atención.
—Chiquito...
Sonreí un poco por el apodo que siempre salía de su boca cuando se la mamaba, me la metía o yo se la metía a él, pero más salía por las dos primeras circunstancias. No esperé mucho por lo que fui cubriendo su pene con mi cavidad bucal, el sabor de su líquido pre-seminal contra... Me separé exaltado al escuchar como abrían la cerradura de la puerta principal, miré a Yoongi con pánico y en un segundo ya estaba de pie y el tratando de acomodar sus prendas, los pasos pesados, los conocía, Tae.
— ¡Taetae! ¿Saliste temprano del trabajo?
— Sí, bebé.
Se estaba acercando para darme un beso pero mis labios se juntaron en una fina línea con fuerza, el líquido de Yoongi seguía en mi boca, luego de ello Taehyung sólo me sonrió, avanzamos a la sala donde se podía ver a Yoongi viendo televisión con una expresión neutra.
—No sabía que Yoongi estaba aquí —
Murmuró.
— Vino a hacerme compañía un momento.
—¡Hola Yoongi!
A Yoongi le caía bien Taehyung, a Taehyung igual, aunque aquél se hiciera el frío. La erección de Yoongi no pasaba desapercibida por lo cual sonreí un poco, a mi con el susto se me fue la calentura, por suerte.
