Jeff The Killer Del Odio Al Amor

El comienzo

Era de noche y me acuerdo que, slenderman me había llevado a una casa llena de personas (si se pueden llamar así) extrañas. Todos eran asesinos. Me acuerdo uno que parecía de mi edad y de llamaba Ben. Mientras saludaba a todos por las escaleras bajo alguien, un chico con pelo castaño oscuro,piel blanca, un suéter blanco, pantalones negros y zapatillas. Tenía los ojos completamente negros, no tenía párpados y una sonrisa echa de oreja a oreja con lo que podía ser hecha con un chuchillo.
Estaba bajando cuando slenderman le habló.

- Jeff, ven a saludar a la nueva integrante: le dijo con un tono agradable.

- pff, slenderman trajiste a una humana para violarla? Jajaja que pedófilo eres e jajaja: dijo mirándome

-Jeff no es eso, será cuando crezca la nueva creepypasta. Tiene la marca.

- ohhh ahora entiendo todo- vino y me miró a mi de serca- Te crees mucho por tener una simple marca jaja, serás una más que no se sabrá defender, mocosa.

En ese momento se fue y Yo quede totalmente confundida. ¿De que marca hablaban?¿ La que tengo en el hombro? Una simple marca, un círculo con una equis o... Bueno pensándolo bien si es motivo para que unos monstruos me trajieran, ya que ahora que lo pienso esa marca no es tan normal.
Jeff ya se había ido de la cabaña. No me quedaría mucho tiempo aquí. Me iría con slender hasta que cumpliera los 18 años y así podría volver entrenada completamente para poder defenderme.

- Cristin, estas bien?: dijo slenderman

- que? O si si estaba pensando solamente... Slender? Cuando cumpla los 18 años voy a volver?

-Vivirás conmigo y a los 18 años, te volverás una creepy y volverás.

-Como me voy a convertir en creepy?

- Cuando crescas te lo diré.

No era normal que slenderman no me dijiera, o sería para mal o no se.
Después de unas semanas en la casa y los abucheos de Jeff, uyy como lo odioo. Nos fuimos a otra cabaña más linda, era la cabaña de slender. Dormía en una cómoda cama y me daba de comer, jugabamos era como el padre que nunca tube.
Durante los 5 años, slenderman me enseñó a matar. Antes no me gustaba mucho pero después me empeso a fasinar jeje. Un día me acuerdo que slender y muchos creepys me llevaron a una gran piedra, no me acuerdo todo lo que me isieron pero me acuerdo que me dolió mucho.
Me desperté en la avitancion de la cabaña de slender completamente bien me mire al espejo y me di cuenta de que hoy era mi cuplaños, cumplía 18. Me miraba en el espejo, mis pechos estaban grandes al igual que mis nalgas jaja. Mi piel estaba blanca como la cara que no tiene slenderman. Mi pelo estaba risado y mis ojos eran completamente negros. En ese momento no se porque me acorde de jeff. Tocaron la puerta.

- cristiinn: dijo una voz graciosa, era slender que entró cantando con una tortita. Yo sonriente la sople y slender me dió un abrazo.

- gracias slender- le dije sonriendo mientras le daba el abrazo.

- mira en lo que se a convertido mi hermosa hija- el ya me consideraba su hija y yo a el un padre.

- Hoy iremos?

-Si.

Iríamos donde todo comenzó a la casa de los creepypastas yo en parte estaba feliz y nerviosa a la vez. Que tal si no le gustaba en lo que me había convertido o algo así? Que tal.. Si Jeff. No que? El te había maltratado y te había dicho un montón de cosas y tu estas pensando en lo que el pudiera llegar a pensar de ti? No. Iremos a la casa y estaremos lo más hermosa posible, simple pero hermosa.
Comence a cambiarme y me puse una blusa negra que hacia resaltar mis pechos, pantalones azules ajustados y zapatillas negras. Baje las escaleras para encontrarme con slenderman.

- Estas hermosa Cristin, así me parece aras quedar a todos con la boca abierta.

- Tu crees? No es para tanto.

-Para mi estas hermosa.

Extendió su largo brazo para que yo encastrara el mío con el de el y así salir como una princesa. Mientras caminábamos íbamos hablando de los últimos dos asesinatos. A lo lejos una viendo que a lo lejos se veía la cabaña. A mi me agarraron unos nervios.