Bungou stray dogs- Port Mafia

Todo cambiara ahora ¿no?

Estaba en un coche negro en el cual solo iban Dazai-san, el conductor y yo.

Habia un incomodo silencio o almenos eso me parecia a mi, ya que nadie habia hablado despues de entre en el auto. Yo simplemente miraba hacia la ventana ya que afuera se podia ver que estaba anocheciendo, lo cual me hizo recordar esos tiempos en los que subia al techo de las casas a observar el periodo de tiempo en el cual el sol se ocultaba para dar paso a la luna, y observar las estrellas en el cielo.

Esos dias eran de mis favoritos, era uno de los pocos placeres que podia disfrutar.

De la nada comenzo a llover, lo cual me tomo por sorpresa mientras recordaba el bello panorama de la noche que me hacia dormir.

El silencio incomodo seguia hasta que senti que alguien me miraba, era un extraño sentimiento, nada agradable. Pero el unico que podia estar observandome en ese entonces, era Dazai-san.

El hablo, rompiendo ese silencio.

- ¿Cual es tu habilidad?- pregunto de la nada. Observandome directamente.

~De nuevo con sus preguntas~ pense mientras aun miraba hacia la ventana.

- Es dificil de explicar- conteste algo cortante- no me gusta hablar de ella.

-¿Puedes mostrarmela?- pregunto nuevamente.

~El enserio quiere saber~ pense.

- No quiero hacerlo- dije desviando la vista de la ventana y mirandolo directamente.

Esta vez parecia algo enojado, talvez por la manera en que le respondi, pero esos ojos habian cambiado, no eran los mismos que la ultima vez, habia algo roto dentro de ellos, oscuridad y muerte.

- Pronto lo haras- dijo mirando a mis ojos.

El coche se detuvo en ese pequeño periodo de tiempo mientras lo observaba, el conductor habrio la puerta del lado de Dazai-san, el cual bajo enseguida del coche, y se voltio para ofrecerme una mano nuevamente, la cual yo tome. Su piel estaba helada, no recordaba si la ultima vez habia sido igual, ya que habia estado con algo de confusion. 

Al bajar del auto, simplemente lo segui observando su espalda.

Al parecer Dazai-san tenia un puesto respetable en La Mafia , ya que al verlo pasar lo miraban con respeto e incluso envidia.

Dazai-san se detuvo enfrente de un chico que parecia de mi edad, el tenia una gabardina negra, parecida al saco que Dazai-san llevaba, ojos oscuros, y un pequeño tono blanco en las puntas de enfrente de su cabello.

El parecia darle instrucciones al chico, despues de hablar con el, se hacerco a mi.

-Sigueme- dijo sin ninguna exprecion en su rostro.

Lo segui por un lárgo pasillo de paredes grises.

Hasta llegar una habitacion la cual habrio, y me invito a pasar con una indicacion de su mano.

-Esta sera tu habitacion ahora- decia mientras que me observaba- mas tarde vendre por ti para la cena.

Fue todo lo que dijo y se retiro.

En el centro de la habitacion habia una gran cama, la cual tenia un cambio de ropa arriba. Una comoda al lado de la cama. En el lado izquierdo de ella se encontraban una mesa y una silla. Mientras que al terminar la habitacion habia un cuarto de baño. Las paredes de la habitacion eran de un color vino opacado.

Suspire y ma deje caer en la cama, mirando el techo, mientras susurraba:

-Nunca habia tenido una cama- con una pequeña sonrisa en mi rostro.

Despues de unos cuantos segundos pensando como serian las cosas ahora.

Sin mas me levante de la cama y me dirigi al cuarto de baño, abri la llave para llenar la tina de baño mientra me desvestia y me soltaba el cabello. Me mire al espajo por unos segundos, observando a esa chica de 17 años, castaña, ojos grises, con un terrible pasado lo cual me hizo soltar algunas lagrimas. Pero eso cambiaria ahora ¿no?. 

Me meti a la tina y cuando termine, me levante mientras me vestia, con una blusa blanca de manga larga, una corbata negra, unos vaqueros negros, y unas sapatillas. Me cepille el cabello y lo ate en una coleta.

Mientras esperaba al chico, me sente en la silla que se encontraba al lado de la mesa, pensando en lo que tendria que hacer, para merecerme esta habitacion.

Despues alguien toco a la puerte.

~Debe ser el chico~ pense.

Me levante enseguida y abri la puerta. Y si, era el.

-¿Estas lista?- me pregunto.

-Si- conteste seriamente.

-Bien, sigueme- dijo el nuevamente.

Lo segui hasta llegar a una gran habitacion con una mesa en el centro, en la cual ya estaba servida la cena, alrededor de la mesa, en una silla se encontraba Dazai-san, en otra un chico de la edad de Dazai-san, pelirrojo, de ojos azules, y con un ridiculo sombrero, bueno almenos eso pensaba yo, en la siguiente un pequeño niño con una...¿muñeca?. El resto de las sillas, se encontraban vacias. 

-Tomen asiento- nos indico Dazai-san a mi y al chico.

Me sente al lado del chico y observe el plato de la cena. Ami lado izquierdo no se encontraba nadie, y enfrente de mi, estaba el niño.

Comenze a comer, tratando de no parecer algo desesperada, ya que en verdad estaba ambrienta.

Despues de unos segundos el chico pelirrojo hablo.

-Y ¿cual es tu nombre?- pregunto en mi direccion.

-Me llamo Hayami- conteste mirandolo a los ojos.

- Un gusto Hayami- dijo con una pequeña sonrisa en su rostro- Yo me llamo Nakahara Chuuya, puedes decirme Chuuya.

- Yo me llamo Yumeno- dijo el niño que estaba sentado enfrente de mi- un gusto Hayami-san, espero poder jugar contigo un dia- contesto con una sonrisa algo...¿diabolica?.

- ¡Yumeno!- exclamo Dazai-san seriamente por las palabras de este. A lo cual Yumeno simplemente bajo la mirada.

Dazai-san miro en direccion de el chico de ojos oscuros.

-Aun no te haz presentado, ¿cierto?

A lo que el chico voltio a verme.

- Mi nombre es Akutagawa- dijo con una sonrisa tan falsa- un gusto.

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Despues de la cena, Dazai-san me llevo a mi habitacion, cuando estabamos en la puerta, hablo.

-Espero que te haya gustado aqui- dijo mirandome a los ojos.

-Si me agrado- dije algo confiada.

-Bien, mañana iniciara tu entrenamiento- dijo seriamente- vendre por ti temprano, asi que descansa- y una pequeña sonrisa se dibujo en se rostro.

~Esto no me esta gustando~ pense

-Esta bien- dije con una sonrisa fingida y entre a la habitacion.

Al entrar lo primero que hice fue desvestirme, y sacar un cambio de ropa de la comoda, para dormir. Despues simplemente me acoste en la cama.

~Espero que el entrenamiento no sea duro~ pense hasta quedar dormida.

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Aqui esta la segunda parte :v

Ya es mas larga que la anterior como prometi ahora son 1036 palabras :v!

Espero les haya gustado :3