- Mis amigos estaban en lo cierto -susurra una voz ronca sobre mi nuca-
- ¿Perdona? -lo miro confundida-
- Eres muy linda ¿Te lo han dicho?
- Si -respondo- Y hombres mejores que tu
- Eres muy graciosa pequeña -sonríe-
- ¿Pequeña? -lo miro incrédula-
- Ambos sabemos que eres menor de 18 años -susurra sobre mi hombro-
- Eso es mentira -respondo nerviosa-
- Claro que no -mira mis piernas- No creo que tus padres estén contentos de saber que su pequeña y adorada hija, se encuentre aquí -Desliza sus dedos por mis piernas-
- ¿Que demonios te pasa? -me levanto molesta-
- Mi silencio tiene un precio -sonríe y me mira de arriba abajo-
- Eres un puto puerco -respondo-
- Y tu eres una niña muy mal educada -me toma de las muñecas-
- Que te den por el culo Clifford -escupo llena de rabia-
- No no no -sonríe- Creo que a ti es a la que le darán por el culo -besa mi cuello- Y esa persona seré yo
- Ni en tus putos sueños -susurro en un hilo de voz-
- En mis sueños te he hecho las cosas mas placenteras que puedes encontrar en este mundo -lame el lóbulo de mi oreja- E incluso me pides mas y mas
- Basta -cierro los ojos al sentir su lengua por mi cuello-
- Y ¿Sabes que es lo mejor? -niego con la cabeza- Que me llamas Daddy
