My name is Bill. ¡! Book 2. Billdip.

Capítulo 1.

17 de septiembre 1997.

—Las mentiras, las sonrisas falsas, mantener las apariencias. Vamos, es divertido vivir aquí

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Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Muchas personas salían de la iglesia animadamente después del sermón de los domingos.

—¡Oh! El padre dio unas palabras tan hermosas— Habló la señora Cipher—. Y tan ciertas. En especial cuando habló sobre la homosexualidad. Últimamente los jóvenes ya no siguen el camino de dios y cometen tales atrocidades.—Comentó con desaprobación. La mujer chequeó que sus hijos estuvieran tranquilos y dentro del auto para luego ella entrar.

—¡Bah! No tienen perdón de dios. Se irán todos al infierno.—Rió el señor Cipher mientras se montaba en el auto.

Los Cipher eran una familia muy poderosa. Dueños de los hoteles más grandes en el país.

Eran muy correctos, estrictos y duros en cuanto a la crianza de sus hijos. Tenían que ser perfectos.

Además de ser una familia muy pretenciosa, también eran sumamente religiosos.

La palabra de dios siempre estaba presente, cumplir con todo tal cual como dice la biblia. Pulcros, tratando de no cometer pecados.

Recitaban eso todos los días en el desayuno, antes de empezar con la oración.

Y el hijo del medio, Bill, al escuchar esas palabras temblaba, sus dudas aumentaban y por las noches lloraba susurrando “no quiero ir al infierno, no quiero ser un pecador.”

El joven se consideraba un pecador solo por el hecho de atraerle más los hombres que las mujeres.

“—No quiero ir al infierno, no quiero ser un pecador. Perdoneme por favor, señor”.

[...]

Bill, se mantenía en el auto más callado de lo normal. No le estaba reclamando a Phill por molestarle. No estaba mandando a callar al llorón de su hermano.

—¿Hijo, estás bien?—Preguntó preocupada la madre, llamando la atención de ambos hermanos y el padre.

—Seguramente alguna novia lo dejó y por eso está todo sensible.—Se burlo Phill. A pesar de ser el mayor, era muy inmaduro.

—¿Novia? Jamás nos comentaste que tenías novia, Bill.—El padre parecía muy sorprendido, al igual que la madre.

—¿¡Que!? No, no tengo ninguna novia—Gruño el rubio—. Solo que, nos vamos a mudar y... tengo amigos aquí, no quiero dejarlos.—Mintió.

—Oh, solo es eso—Volvió a hablar el padre—, no te preocupes, eres muy sociable, seguramente conseguirás muchos amigos en Gravity Falls.

—Oh, si. Escuche que era un pueblo maravilloso.

—Y yo escuche que habían muchas chicas lindas.—Phill sonrió pícaro dándole un codazo a sus dos hermanos.

El rubio solo dio una sonrisa fingida, para volver a decaer.

Mientras sus padres y hermanos conversaban animadamente el no pudo evitar pensar... ¿que pasaría si sus padres se llegasen a enterar de su sexualidad?

Aunque no estaba del todo definida.

Aquél pensamiento lo calmó un poco. Debía aclarar todo y no entrar en pánico.

Ahora mismo lo mejor era pensar en la mudanza.

—Oh, esta noche se realizará la fiesta de despedida. Recuerden que al llegar quiero que se alisten, vendrán muchos invitados y los quiero presentables.

El pelirrojo y el peliazul sonrieron emocionados.

Bill volvió a sonreír fingido.

Debía despertar y volver a la mentira. Volver a ser una estúpida marioneta. Volver a fingir ser perfecto.

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N/A: Im back(?). Hey, queridos lectores. Supongo que he vuelto ¡WIIII! Pero tan solo con esta historia. ¡Oficialmente MNIB sale del hiatus! Ay, bueno, poco a poco iré sacando mis otras historias del hiatus. Oh, actulizare este fic solo los fines de semana. Eso es todo. Bye.