What The Bullying Began {Leondre Devries}

~8.Mini-Fiesta~

-¡Ahhhhh!-escuché gritar a mi hermana.
Me levanté corriendo y fui a su habitación.
-¿Qué pasa?-pregunté alterada.
Estaba en el suelo con el móvil al lado y todas las sabanas tiradas.
-Me caí de la cama-dijo nerviosa.
-Claro...-afirmé no muy convencida.
Me fui a duchar y me vestí.

Desayuné unos cereales, no tenía muchas ganas de comer.
Salí de casa con el skate.
Patinando pasé de largo la casa de Leo y la de Alessia pero me detuve en el callejón de las gemelas, Cameron y Dylan.
Cuando salimos de allí fuimos a la entrada del instituto donde estaba Andrew.
-¿Alessia y Leo no están?-preguntó confundido. Las gemelas y los dos morenos tenían la misma expresión.
-No sé-dije subiendo y bajando mis hombros.
Las gemelas me llevaron a una esquina.
-¿Dónde están?-preguntaron a la vez.
-No sé, a lo mejor liándose por ahí-dije con cara inexpresiva.
-¿Qué?-preguntó Sofía.
-Ayer los vi besándose en el parque-explique seria.
-Nunca harían eso, créeme, Alessia no es así, Leo no sé muy bien como es pero tiene pinta de estar enamorado de ti, y Alessia de Andrew, seguro que fue un accidente-me "consoló" Lucía.
-Yo no creo en los accidentes-dije con voz enfadada-Todo pasa por algo, karma, destino, etc.
Las gemelas me abrazaron al ver que estaba al borde de las lagrimas.
-No sé que me pasa-las abracé medio riendo medio llorando.
-_____, ¿Estás bien?-escuché su voz.
Me giré para quedar cara a cara con ellos.
-Yo si, ¿Y tú Leondre?-pregunté con una sonrisa claramente falsa.
No contestó, se fue con la cabeza baja.
-_____, ¿Podemos hablar?-preguntó Alessia.
Sonó el timbre.
-Lo siento tengo clase-Dije y me fui.
...
¡Genial! Me sentaba al lado de Leondre.
Cuando sonó el timbre del descanso me iba a ir pero Leo me agarró del brazo.
-Suéltame-dije con un tono enfadado.
-Espera, te puedo explicar lo que viste...-empezó a explicar.
-¡No quiero saber nada!-grité al borde de las lágrimas.
Me solté de su agarre y salí corriendo al baño ante las miradas perplejas de mis nuevos amigos.
*Narra Leo*
-¡No quiero saber nada!-gritó casi llorando.
Se fue corriendo, dejándome con cara de bobo.
Salí y allí estaban todos mis nuevos amigos mirándome con cara de asesinos, y Alessia, sentada en el suelo y con las manos en la cara.
-¿Que has hecho Leondre?-preguntó en un suspiro Andrew.
-Larga historia-bajé la cabeza en señal de que no quería hablar de ello.
El resto del día transcurrió igual.
Estábamos todos reunidos a la salida.
-Que os parece... ¿comida en mi casa?-preguntó Alessia.
-¡Si!-gritaron las gemelas a la vez.
-Me apunto-dijo Andrew.
-Cuenta conmigo-se apunta también Cameron.
-Rt-saltó Dylan.
-¡Ok!-asentí.
Todos miramos a _____.
-No se hay muchos deberes y...-puso una excusa.
-¡Venga!-gritó Sofía.
-¡Solo un rato!-esta vez fue Lucía.
-Vale-suspiró pesadamente.
*Narra _____*
Ahora nos dirigíamos a casa de Alessia.
Ganas de ir: Cero.
¿Por qué voy?:Sofía y Lucía.
Las gemelas me obligaron a ir a casa de Alessia. No querían que las dejara solas. ¿No entienden que hay otras 5 personas?
-Bueno, ¡adelante!-exclamó cuando abrió la puerta-Mis padres no llegarán hasta tarde, estáis como en casa.
Comimos todos juntos y luego nos sentamos en el jardín, con las piernas en la piscina.
-¡Que calor!-dijo Sofía.
-¡Que aburrimiento!-habló su gemela a la vez.
-¡Lo tengo!-dijo Alessia con una sonrisa malévola.
Se fue corriendo hacía dentro.
Volvió a los dos minutos con una botella de cerveza.
-¡Alessia Banks!-gritó Andrew.
-¿Qué vas a hacer con eso?-preguntó Cameron.
-Emborracharme-contestó ella de lo más normal.
-¿Qué?-esta vez habló Dylan.
-Soff-llamó a la pelirroja-ven aquí.
Sofía fue a su lado, abrieron la botella mientras susurraban cosas y la vaciaron en el jardín del vecino. ¿Malas vecinas? ¿Dónde?
Volvieron a nuestro lado y nos hicieron sentar en círculo.
-Jugaremos a Prueba o verdad (Prueba o verdad/verdad o atrevimiento/como sea)-habló Sofi.
La botella, bien situada en el medio, empezó a girar.
-Sofía-dijo Lucía-¿Prueba o verdad?
-Verdad-respondió ella.
-Di quién te gusta-rió.
Sofía soltó algo en español a Lucía, algo como "eres retrasada" (la negrita significa que esta en español) o algo parecido, cosa que no entendí.
-Sí,-asintió Sofi-si me gusta alguien.
-Uuuu-cantamos todos a la vez.
La botella se paró en Leo.
-Leo-le miró Alessia-¿Prueba o verdad?
-Verdad-contestó Leo.
-¿Ya te han dado tu primer beso?-volvió la rubia.
-Si, hace poco-me mira discretamente. ¡Momento incómodo!
-¡Detalles!-gritan las gemelas a la vez.
-Pues...-Leo por dios no-Fue el otro día, me llamaron a las tres de la mañana para que bajara de casa, estuve jugando a la botella con unas amigas y ahí pasó...-gracias Leo por recordármelo...
-Awww-dijeron los chicos riéndose muy fuerte.
Volvimos a girar la botella. Cayó en mi.
-_____-dijo Cameron emocionado.
-De eso nada Cam, me toca-le frenó Sofía.
Cameron hizo un puchero.
-_____-habló otra vez la pelirroja-¿Prueba o verdad?
-Prueba-respondí orgullosa-No soy una cobarde.
-¡Reto doble!-gritó Dylan.
-Okay.
Giramos la botella para ver quien tenía que hacer la prueba conmigo. Pasó lo que me temía, Leo.
-¡Leo!-gritó Sofía-Vale, os reto a que os metáis en el armario de la entrada siete minutos, ¡cronometrados y vigilados!
Suspiré.
Nos fuimos al armario, por suerte era espacioso y nos pudimos sentar en el suelo.
-_____-habló, más bien susurró-déjame por favor que te explique lo que pasó en el parque.
-¿Qué?-me hice la que no sabía nada.
-Vamos-suspiró-Sé que nos viste, se que aunque no seamos nada te dolió, y sé que lloraste.
-Leo, no quiero...-me interrumpió.
-Escúchame-pidió.
-Tienes cinco minutos-dije seca.
-Lo que viste no fue lo que pasó, yo le había dicho una cosa a Alessia, ella se puso contenta a saltar, me agarró y perdimos el equilibrio y caímos provocando el beso.
-Suena creíble-murmuré.
-Es la verdad, ¿me crees?-preguntó.
-Con una condición, ¿que le dijiste para que se pusiera tan contenta?-pregunté confundida.
-Que...-se sonrojó-Quemegustabasyquemeayudaraaconquistarte-habló rápido.
-¡Más despacio!-reí.
-Que me gustabas, y que me ayudara a conquistarte-se volvió a poner rojo, que mono, espera, ¿Ha dicho que le gusto? ¡Si, lo ha dicho! Reacciona estúpida te está mirando.
-Ehh... Yo...-traté de hablar.
-Entiendo si estás incómoda-agachó la cabeza.
-Leo-me miró a los ojos-Tú... Tú también me gustas.
Abrió los ojos como platos, los siete minutos se me estaban haciendo eternos.
-¿En... En serio?-se tapó la cara para que no viera su sonrojo.
-Si...-seguro que yo también estoy como un tomate. ¡Pero él es tan mono! ¿A qué esperas? ¡Bésale!
-¿Te importa si...?-dijo señalando mis labios lo más rojo que se podía estar.
-No-susurré.
Se acercó poco a poco y sus labios rozaban los mios, en medio del beso, abrieron la puerta.
-Chicos ya...-se interrumpió Andrew-¡Ahh!-gritó como una niña pequeña.
Leo y yo nos separamos y vinieron todos corriendo.
-And, ¿Qué pasa?-preguntó Alessia.
-Esto no me huele bien, Andrew grita, armario, dos tomates-rió Sofía pero paró-¡No!-se llevó las manos a la cara-¡No me digáis que...! ¡Yo lo sabía!-se fue haciendo un bailecito.
Lucía pareció entender porque tuvo la misma reacción que su hermana.
Y hay fue Alessia.
-¡Os habéis besado!-gritó.
Callamos, y se pusieron todos eufóricos.
Estuvieron así de pesados toda la tarde.
Cuando llegó el momento de irnos se pusieron más pesados porque nos íbamos juntos y solos.
-¡Adiós pesados!-reí.
A mitad de camino nuestras manos se rozaron y yo cogí la de Leo.
-¿Te molesta?-pregunté.
-Tú nunca-respondió sonriendo.
Llegamos a su puerta.
-Aquí viene la despedida-dijo secándose una lágrima falsa.
Reí y le di un beso corto.
-¡Ahh!-se escuchó gritar a dos niñas.
Miramos hacia arriba y estaban Tilly y April en la ventana de la habitación de la primera.
-¿Pasas?-me preguntó Leo-Así hablamos con ellas.
Asentí y pasamos, subimos directamente ya que Victoria no estaba.
-¡Adelante!-dijo Tilly haciéndonos pasar antes de que tocásemos a la puerta, ¿que digo haciéndonos pasar? ¡Empujándonos dentro!
-¿Desde cuando? ¿Hace mucho? ¿Pensábais contárnoslo? ¿Durará?-interrogaron.
-No somos nada-dijo Leo.
-¿Y ese beso?-pregunto April.
-Un beso de amigos-mentí.
-Venga ya-se quejaron.
Nos fuimos a casa, cenamos y me metí en mi cama, y obviamente pensé en él, Leondre Devries.