Abrí las puertas de par en par, se sentía un ambiente pesado, sólo veías personas ausentes en sí mismas. Era un salón muy amplio con techos altísimos y de ellos colgaban unos candelabros tradicionales bañados en oro y con todas las velas encendidas. Las ventanas estaban cubiertas con vitrales preciosos, de colores indescriptibles, varias figuras adornaban el salón; pero no repare mucho en ellas. Las bancas de caoba fina acomodadas A la perfección en las líneas en la su lejo blanco, además se percibía un olor a incienso. Había una abertura entre las dos filas de bancas; un pasillo largo y estrecho. Donde antes habían pasado ya miles de novias, con sus elegantes vestidos blancos caminando hacia su " final feliz "; y también miles de personas así como yo, dolidas, entristecidas, que aún no asimilan lo que está pasando en ese momento. Con la pena y el sufrimiento calándoles el alma.
Mi madre y yo nos encaminamos por el pasillo detrás de una larga fila de rostros cabizbajos vestidos de negro, en un silencio tan profundo que a veces se podía escuchar el latir del corazón de la persona que se encontraba tu lado. Voltee a ver a mamá, tomada de mi brazo derecho tenía una expresión de profundo tristeza, pero más que eso era una expresión de gran decepción.
Después de verla, mire al frente, no en un punto específico y sentí como las lágrimas comenzaban a brotar de mis ojos. Por fin estaba asemejando la realidad de las cosas...
Al final del pasillo había un ataúd abierto, en las orillas se alcanzaban a ver finos y preciosos detalles que lo adornaban al igual que su alrededor había un centenar de rosas blancas en todas las formas posibles. Una vez hoy que ningún color es más perfecto que el blanco, y ahora entiendo; porque la perfección de la muerte es tan inimaginable como la pureza que existe en el blanco. En su interior contenía un cuerpo que alguna vez estuvo vivo, que alguna vez inhalaba y exhalaba aire, y que alguna vez hizo feliz a mi primo Benny.
Y allí me encontraba yo, mirando con desolación por última vez el rostro de Sara, la ex novia de Benny, al verla ahí nunca imaginé que estuviera muerta si no simplemente dormida, arreglada con su mejor ropa; aunque aún no entiendo el porque las personas ponen así eso seres queridos cuando mueren.
Nos habían avisado ayer por la tarde, yo me acababa de levantar e iba de camino a contarle a mi madre el sueño tan extraño que había tenido, vi a mi madre junto a Duncann, nuestro perro, en la isla de la cocina hablando por teléfono. Ella de pronto comenzó llorar y cuando colgó me contó lo que había pasado, todos amábamos a Sara ella era la típica chica carismática que le caía bien a todo el mundo, pero al parecer tenía serios problemas depresivos y de baja autoestima.-¿Cómo te sientes? - Me volteó ver con una expresión muy devastada, parecía no haber comido ni dormido lo suficiente. Benny estaba sentado en el rincón del salón y decidí acompañarlo.
-¿ cómo te sentirías si hubieras matado a tu novia?- Lo miré desconcertado.
-¿De que hablas?.
-Stephan, ¿no lo entiendes? , Por mi culpa ella está muerta. Tuvimos una discusión y termine con ella por el chat.-Lo miré aún más desconcertado, tratando de averiguar si se trataba de una mala broma o algo así, pero ese es el problema, Benny estaba hablando más en serio que nunca en su vida... Ese fue el sueño que tuve.
-¡No! ¡No es posible! - E inesperadamente las lágrimas comenzaron a brotar nuevamente de mis ojos, no sé si fue por estar conmovido u otra razón, pero lo que aún no logro comprender es el porqué de mi sueño y el porque se volvió realidad...
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Soñando hasta morir- Parte 1
Teen Fiction¿Has soñado cosas extrañas o muy reales? Pues prepárate para enfrentarlos cara a cara en esta fascinante novela, llena de misterio y drama.