Mas Allá De El Limite

IV

Estaba en un cuarto totalmente blanco y no había absolutamente nada, sólo una puerta en cada una de las 4 paredes.

"Este sueño.. es diferente . ¿donde estoy?"

De repente una voz, no se de donde,empezó a escucharse en el cuarto.

"Hola Alejandra... Verás, lo que acabo de hacer es mandar a Demián al mundo humano, donde estas tu, como sabrás, el es simplemente un sueño,no es real, pero... Me pareció divertido ver que pasaba si lo mandaba a donde tú estabas, claro, el no sabe que es un sueño. Lo mande con recuerdos ficticios y una madre ficticia... Por cierto, me llamó David. Un gusto, bien, donde estas en este momento es en una etapa antes de entrar al sueño en verdad. Siempre pasas por esta etapa aunque no te des cuenta, a veces llegas a quedarte aquí demasiado. Por eso se piensa que los sueños son cortos, la mayor parte de él sueño la pasan en esta, la 3era etapa... Bien, eso es todo, por hoy te quedarás aquí para asegurarme de que no le dirás nada a Demián, obvio si lo haces habrá consecuencias"

-¿cuales consecuencias?- al fin hablé después de un largo rato.

"Demián desaparecerá y no lo podrás ver ni en tus sueños..  ¡ah! También hay una fecha límite, que claro no te diré, sólo nos volveremos a ver hasta una semana antes de la fecha, si antes de el día que yo elija no estás completamente enamorada de él, desaparecerá. ¿y por que esa condición tan absurda? Pues el se creo por el amor tan grande que te tenía en su vida pasada, claro el no se acuerda de ello, de una u otra forma apareció en tus sueños en lugar de reencarnar... Así que cumplí su deseo"

-y tu.. ¿eres...?- pregunte haciendo un ademán con la mano para que el continuara.

"Un Dios ¡claro! El Dios de los sueños"

-aja...bien, esto es más irreal que cualquier cosa que halla leído..en fin, ya entendí todo el tema de Demián, ¿por lo mientras me tendré que quedar aquí ? Necesito hablar con el sobre lo que pasó hoy, prometo no decirle nada- dije fingiendo suplicio, necesitaba decirle a Demián que esto era una farsa, que el no era real. Literalmente.

"ah ah"dijo y movió su dedo índice en modo de negación" por lo mientras te quedarás aquí está noche. Y por el poder que me confieren como Dios, en este momento, te quedarás.. ¡Dormida!"

Después de eso todo se volvió negro.

A la mañana siguiente me desperté demasiado temprano, antes de que mamá viniera a despertarme como es su costumbre, pero por alguna razón, ya no tenía sueño, así que decidí bañarme, vestirme, arreglar me y arreglar las cosas de mi mochila. Vi que todavía me quedaba tiempo para la escuela y me senté en mi cama pensando en Demián, debía saber que no era real, pero no quería que se fuera.
De repente mi celular empezó a vibrar e hizo un ruido muy corto indicándome que me había llegado un mensaje.

Desconocido: ¡ya despierta floja! Ya es hora de ir a la escuela. Vamos princesa.

Ale: ¿Demián?

Desconocido: si cariño, ¡apurate y sal rápido! Estoy a fuera de tu casa, ¡vamos juntos a la escuela!

Me asomé por mi ventana y me di cuenta que ahí estaba el, se dio cuenta de que lo miraba y saludó con la mano sonriendo tan perfectamente como siempre, imité su gesto pero mi sonrisa fue más extraña.
Agarre mi mochila rápidamente y salí de mi cuarto encontrándome con mamá.

-wow, te levantaste temprano- dijo ella con sorpresa.

-si, no tenía sueño- dije tratando de esquivarla pero me cerró el paso.

-me alegra que seas más responsable- me dio un beso en a frente.

-te amo mamá- dije sonriendo.

-igual yo- abrió paso- lindo día cariño-

-gracias mamá- le di un beso- ¡adiós cuida te!- salí corriendo y me encontré a Demián recargado en el poste de en frente y cuando me vio corrió hacia mi.

-buenos días- dijo sonriendo

-buenos días - dije imitando su gesto.

-permite me- dijo agarrando mi mochila para después colgarla en su hombro.

-no.. no es necesario-

-no, pero me gusta hacerlo- empezó a caminar y yo de tras de el "tan caballeroso como siempre" sonreí ante ese pensamiento.

-O-oye Demián-tenia que decirle ahora que estábamos solos.

-mande princesa-contesto el pero sin voltear me a ver.

-sobre tu propuesta de ayer...-

-ah eso-me interrumpió- no es necesario que contestes ahora, piensa lo bien... Yo te esperaré todo el tiempo de el mundo-

"Pero no tienes todo el tiempo de el mundo"

Llegamos a la escuela y paso lo peor que pudo haber pasado en la mañana.

- Ale.. estaba a punto de marcarte pero veo que no es necesario-dijo  bruno mirándome y luego a Demián- ¿y tu que haces con ella? Y... Cargando su mochila- pregunto esquivando me y dirigiéndose a Demián.

-fui a recogerla a su casa, y lo de su mochila es para que ella cargará lo menos posible-respondio el encarando a bruno quien le devolvió el gestó.

-jo... Ya veo, que amable pero desde aquí me la llevo yo- bruno intento jalar la mochila pero Demián se lo impidió.

-yo la llevare a su clase- dijo ya con el ceño un poco fruncido.

-tu vas a una clase diferente y yo a la misma... Yo la llevo- en eso sonó el timbre, y por lo que sabía le tocaba matemáticas y era con nuestro tutor, no podía llegar tarde.- ya sonó el timbre, anda corre corre- bruno hizo un ademán con las manos para que se fuera, como si  este fuera un perro- se te hará tardé-. Demián sólo chasqueo los dientes y le dio mi mochila a bruno.

-al rato nos vemos princesa- se acercó a mí y me dio un beso en la mejilla y se empezó a alejar.

-¡maldito que acabas de hacer!-grito bruno desde su lugar y yo voltee a verlo.

-¿esto será así todas las mañanas?- Pregunte sería.

-el me provoca- respondió viéndome pero señalando el pasillo haciendo pucheros.

-infantil- empecé a reír un poco- ven vámonos-le di un golpe en la cadera con la mía y empecé a caminar.

-¡Dolió!- empezó a caminar para alcanzar me-espera me estoy mal herido-

-camina, no seas chica-

-me rompí una uña y todo por tu culpa- fingió voz de chica y yo solté una carcajada.

Este sería un día largo.