Cap 24
Me dirigo hacia mí auto junto a Liam ya que según él lo tiene cerca del mío y me quiere acompañar. Cuando llegamos me despido de él y me siento en mi auto. Primer intento de arrancar... Segundo intento de arrancar...Tercero...
"¡¿Qué carajos anda mal contigo?!" Le grito al auto. Algo tonto, pero me da bronca que ande cuando quiera.. Ugh. No sé por qué de repente anda así. Me cubro mi cara con mis manos y me trato de calmar. Liam sigue allí mirándome.
"¿Qué pasa?" Dice al ver mi reacción acercándose al vidrio de la ventana del conductor.
Golpeo suavemente la parte de arriba del volante y sale un suspiro.
"Nada, sólo..." Digo poco a poco bajando mi volumen de voz. No quiero desquitarme con Liam. Tal vez sea hora de que me aleje de todos y todo e internarme con un libro o algo así, de nuevo.
Liam hace una pequeña risa y por alguna razón logra contagiármela. Por un lado creo que es gracioso, al menos me rio un poco.
Le pediría que me ayude, pero lo conozco y sé que él sabe menos de mecánica que yo. El hecho de estar en un parque queriendo volver a casa y justo estar con el único hombre en el mundo que no sabe ni cambiar la rueda de un auto puede ser frustrante. Pero ese hombre es mi amigo, lo cual me hace ver la situación como algo divertido y gracioso. Creo que va a ser mejor que me lo tome como la segunda opción.
"¿Quieres que te llame a un mecánico?" Me pregunta.
"No...No, aquí yo tengo un pap..." Antes de continuar la frase recuerdo lo que pasó con ese papel, y que al final nunca regresó a mí y me detengo.
"Oh" Dice como si leyera mi mente, como si supiera que lo recordé.
"Mejor sí." Trato de sonreír con él intentando hacer lo mismo. Pobre.
Al menos ese papel no es algo importante. Si fuera algo con valor sentimental o material tendría que organizar con Harry para volvernos a ver y que me lo de. Y no creo que eso sea un encuentro de 5 segundos como debería ser. No sólo por él, sino que seguro me quedaría con él. Al menos lo reconozco. Obviamente, sólo en mi mente.
Mientras mi cabeza sólo piensa en eso, mi cuerpo se las arregla para seguir sin ella y bajo de auto mientras Liam está llamando al técnico.
"Vendrá en 5 minutos." Me dice cuando cuelga.
"Genial." Le digo mostrándole una pequeña sonrisa.
Que bueno que no se fue cuando me subí al auto, si se hubiera ido en serio estaría en problemas. Por más buenos amigos que tenga no creo que ninguno venga sólo para arreglarme el auto, ya que nadie de mis amigos vive en el pequeño centro donde está éste parque, todos vivimos en el pequeño pueblito moderno perdido en la ciudad.
No veo la hora de irme a vivir a alguna ciudad grande, como New York, o tal vez Los Angeles, o tal vez ir más lejos, aún más lejos... Un lugar como París. Aunque ya me iré de aquí para irme a la universidad, después de ésta me encantaría recorrer el mundo, sería un sueño.
Jasmine, estás pensando en recorrer el mundo y ni siquiera te puedes volver a tu casa porque tu auto no quiere arrancar, me dice mi subconsciente haciéndome volver a la realidad.
"Y ¿A donde irás ahora?" Le pregunto a Liam tratando de olvidar el ambiente que se formó hace unos minutos.
"A mi casa, tengo que ir a cuidar a mis sobrinos que mi hermana se va. ¿Quieres venir y ayudarme?" Dice con una sonrisa. No sé que responder.
"Ehm, yo..."
"Digo, si no quieres o no puedes no hay problema." Bueno... Total no tengo absolutamente nada que hacer, y sus sobrinos son unos muy buenos chicos.
"No, no. Iré." Digo con una sonrisa y su cara se ilumina con su sonrisa casi perfecta. Sería aún más perfecta si tuviera los adorables hoyuel... ¿Qué? Esto no es saludable Jasmine.
Cuando digo esto veo que un hombre vestido de azul, con sus manos manchadas, algo pelado y con un poco de sobrepeso, baja de una pequeña grúa que tiene un logo igual al que está en el traje del hombre y se acerca a nosotros. Es el mecánico.
Luego de que nos presentamos y lo empieza a revisar nos dice que no es nada grave, pero se lo tendrá que llevar al taller y que en un día ya estará listo. No lo puedo creer, ¿Cómo volveré a casa después de la casa de Liam? Cuando él dice eso Liam me mira como con decepción. Capaz mi cara está igual pero no lo puedo controlar.
"Ok, no hay problema." Digo y me da su tarjeta con la dirección y permito que se lo lleve con la grúa. Al menos mí papel con el número de un mecánico volvió.
"Escucha, si quieres te dejo en tu casa." No pretendo que después de estar en su casa me lleve a la mía, serían demasiados favores y no tolero que la gente haga tanto por mí, aunque sí tengo que admitir que me decepcioné aún más, ya me había hecho la idea de que iba a jugar con sus sobrinos junto a él. Hubiera sido muy divertido. Ya lo hemos hecho un par de veces, y me divierto mucho con ellos y me río mucho en serio. A veces ellos pensaban que Liam y yo... Éramos algo, pero no. Aunque algunas veces les hemos hecho un par de bromas sobre eso.
"Okey." Le digo tratando hacer una pequeña sonrisa. Él pone su mano en mi hombro y me lo frota suavemente.
Me subo al auto de Liam mientras estoy viendo cómo la grúa se lleva mí auto. No sé si debería decir lo que pasó en casa. Depende cómo esté el clima allí.
Ya han pasado muchas cosas hoy, poco a poco estoy tratando de solucionar todo. No fue un día terrible, pero tampoco fue demasiado bueno. Tuve que soportar gritos, una pelea, que me griten a mí y encima después tuve que andar mostrando una sonrisa. Todo en cuestiones de minutos. Minutos completamente eternos para mí, y creo que también para todos los que los vivimos. Bueno... Al menos creo que para Liam y yo... No sé si Harry lo sintió igual o esos minutos para él fueron completamente normales.
Ver a Harry también fue algo... Algo... Pesado, si se podría decir así. Cuando lo vi mientras me miraba estando yo en la bicicleta sentí algo raro, fue algo así como algo en mi panza, nada más. Traté de esquivar mis ojos, para no darle importancia, pero algo en mí hizo que me quisiera bajar e irme. No quería estar allí, aunque también quería estar. Es algo confuso. Y también, según como dirían mis amigos, incorrecto.
Trato de olvidar el tema y trato de escuchar a Liam mientras me cuenta sobre sus sobrinos y algunos temas de su familia. Sonrío y olvido todo.
Llegamos y le agradezco y me bajo.
Cuando entro y recorro la casa parece estar todo normal, Renzo durmiendo, Jonathan en su computadora, Lana mirando la T.V. en el playroom y James y mi madre en el jardín mientras meriendan. Esos 2 son los únicos a los que no quiero saludar, no quiero empezar a responder preguntas. No ahora.
No sé muy bien que hacer así que decido ir a aburrirme un rato con Lana. Cuando me siento en el grán puff al lado del de Lana chequeo mi celular. Hay dos mensajes nuevos. Ambos, como el mundo me quiere tanto, de Harry.

ESTÁS LEYENDO
Attraction
أدب الهواةY cuando menos te lo esperas, ahí estas. Alejándote del amor de tu vida. Y aunque sigas bajo sus encantos, sabes que no tienes que mirar hacia atrás. Porque al fin entiendes, que era sólo atracción.