Emily tomó sus cosas y fue a la habitación que le habían indicado.
-Hola, soy Emily ¿como te llamas tu?
-Soy Sam.
-¿D-donde puedo poner mis cosas?
-Donde tu quieras, puedo quitar las mías si quieres. *Dijo, quitando algunos de sus objetos de una mesa que estaba ahí.*
-¡NO! *dijo en voz alta deteniendo la mano de este para que no las quitara.* Ahí dejalas, yo puedo poner las mías en otro lugar.
-De acuerdo, ammm, espero que podamos ser amigos.
-Si, espero lo mismo.
-¿Y por que entraste a este internado?
-Bueno, hace unas semanas salí con unos amigos, llegué tarde a casa, y papá creyó que ellos eran mala influencia para mi y que debía alejarme un tiempo de ellos.
-Ohh, ¿sólo por eso?
-Si, mis papás son algo exagerados y eso, ¿tu por que estas aquí?
-También me obligaron a entrar aquí.
-Yo quiero salir de aquí de algún modo, quiero hacer algo, no estar encerrada en, en este internado.
-Te entiendo, quiero salir, debe haber una salida.
-Deberíamos buscar ahora, un modo de salir.
-¿QUE? ¡NO! Si la señorita Amber se da cuenta que estamos buscando una salida, nos irá muy mal con...
-¿Con quien?
-Con el encargado del internado, quiere que todo este en orden, y si se entera que estamos buscando una salida, nos irá muy mal.
-Podemos buscar en la madrugada, no creo que se de cuenta.
-Emily no, tu no entiendes, es peligroso.
-Esta bien, no buscaré nada.
-De acuerdo, iré al piso de abajo, ahora vuelvo.
-Si, esta bien.
Emily siguió ordenando sus cosas en un mueble, al momento de estar odernando las cosas, se le cayó una pulsera detrás de este, así que movió el mueble oara sacarlo, pero se encontró con una pequeña puerta.
-¿Qué es esto? *susurró*
Intentó abrir la puerta pero esta estaba cerrada con llave, en ese momento llegó Sam.
-¿Que haces?
Rápidamente colocó el mueble en su lugar y se levantó.
-E-eh nada, se me c-cayó una pulsera.
-Ahhh, esta bien.
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INTERNADO NYLSLCM.
Historical FictionLa cárcel de un grupo de adolescentes entre las nieblas de lo que alguna vez fue una vida llena de color. Rabia, rencor y tristeza es lo que más se respira entre las grises paredes de aquel frío internado. Buscando la manera de salir de una vez por...