UN DÍA DE DISTRACCIÓN

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-¡Oh, no! –exclamé sorprendida- he pasado toda la noche leyendo y perderé el autobús.

Me cambié rápidamente y salí corriendo. El autobús estaba arrancando. Pasé varios minutos corriendo tras él hasta que logré pasarlo y de un brinco me senté en la escalera.

Luego de un rato llegué a la clase del Sr. Willkins, el profesor de matemática, quien siempre nos aburre con sus clases, en las que en vez de enseñarnos, habla de lo terrible y maravillosa que es su vida.

-¡Señorita Main! ¡Señorita Main! ¿Usted sabe la respuesta?

-La segunda guerra mundial

-Esa seguro es una respuesta, pero no creo que sea el resultado de ocho mil ciento cuarenta y ocho dividido seis – dijo entre risas – Señor Ramirez

-Mil trescientos cincuenta y ocho

-¡Muy bien!

Luego tuve Física, química, historia y cálculo avanzado.

A las doce del mediodía, llegué a mi casa, almorcé, me bañé y volví a leer.

***

Lo que tú no sabes es que su madre es la bruja del reino. Ella no quería dejar las cosas así, pero Marcos la convenció de que no me hechizara.

29/10/1892

Marcos se había suicidado. Al saberlo, yo sentí que me arrancaban el corazón y miles de toros enojados lo pisoteaban, y dejaban destruido entre las tierras donde hace poco estaba nuestro amor.

Su madre, enojada por lo sucedido, me dijo:

-A partir de los quince años, comenzando por ti, todas las mujeres descendientes tuyas, no podrán ver el exterior de las personas, sólo podrán ver el color de su alma.

-¿El color del alma? ¿Qué es eso?

-Ese color indica si una persona es buena, mala o trata de ser algo que no es.

-¿Cómo voy a saber que significa cada color?

-Deberás averiguarlo tú misma, así pagarás las penas de mi hijo y las mías.

***

Más que un par de ojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora