Mía caminaba sobre el asfalto, con una sonrisa de oreja a oreja, no podía sentirse mejor, ese día iba a ser su aniversario de dos años con Todd, su Todd.
Aún no se podía creer que ese chico estuviera saliendo con ella, era tan cliché, la típica niña sin amigos se enamora del chico popular y milagrosamente el igual de ella.
Aún recuerda su primera cita...
Su primer beso...
—¿Y tú de qué vas, idiota?—había gritado, con desespero.
—Nada, preciosa, sigue haciendo mi tarea.
—Te juro que si vuelves a llamarme así, voy a...
Sus labios conectaron.
Sonrió inconscientemente al recordarlo, dobló la esquina que la llevaría a la puerta del apartamento de su novio, le iba a dar una gran sorpresa.
Que idea tan maravillosa la mía, se alegrará tanto de verme...
Abrió la puerta con las llaves que él le había entregado hacía mucho tiempo atrás, pero la alegría que ella tanto esperaba nunca llegó, al contrario, no pudo sentirse más devastada al asimilar lo que sus ojos presenciaban...
Sentía una presión en el pecho al ver la escena que se hallaba frente a sus ojos...
Todd...su Todd...
Besándose con su hermana
¿Cómo habían podido? Su novio y su hermana traicionándola..
—Todd...—dijo con un hilo de voz, el mencionado volteó, se sorprendió al ver a su novia allí, parada bajo el umbral de la puerta ¿No iba a estar Mía en un viaje de estudios? Dios santo...no era cierto...
El chico sintió un vacío en el pecho, una sensación de desesperación lo invadió cuando se percató de que Mía estaba llorando, sus preciosos ojos mostraban el dolor que sentía.
Aquella indefensa chica que tanto amaba estaba sufriendo por su culpa...
Mierda mierda mierda
—Mía...Mía espera...—suplicó el chico al ver que la pelinegra se iba corriendo.
La chica no escuchó, comenzó a llorar a mares mientras soltaba sollozos...simplemente corriendo de sus problemas, su hermana se había metido con algo a lo que quería mucho...
Su propia hermana...
—¡Mía cuidado!—se escuchó un grito, por parte de Todd. Ella hizo caso omiso y cruzó la calle...
Solo quería alejarse de ahí...
No debió hacerlo...
Una bocina resonó en los oídos de la muchacha, después un golpe, Mia solo sentía un ardor por todo el cuerpo, le dolía todo...
Un auto la había arrollado, Todd se quedó atónito...la chica que amaba estaba en el suelo, hiperventilando...emanando sangre por todos lados.
—Mía...—sollozó el chico—Mía te amo...
Esas fueron las últimas palabras que escuchó la chica.
Y la imagen del chico que quizo, llorando y sollozando fue lo último que vio.
Para luego ver todo negro.
***********
Todd lloró mucho cuando la ambulancia se llevó a Mia.************
Pero lloró aún más cuando ella fue anunciada muerta