Capítulo 5 - Corazón abierto

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María: Amárrenme, azótenme, háganme un 69, bondage, háganme sumisa, abusen de mi entre todos pero no les hagan daño – dijo en un dramático tono de telenovela – por favor, apiádense de esta pobre y pura virgen

Alex: tu pureza... es casualmente tan falsa como tu virginidad "sor" María

Ophelia: Si mueres hoy... creo que lo que más extrañaré de ti será tu encanto -dijo intentando ser sarcástica

Alex: Y yo extraño tanto la imagen mental que tengo de ti con la boca cerrada, ¡Te detesto Ophelia! – dijo en un tono de voz que dejaba notar su irritación por el comentario, Ophelia se vio obviamente herida. Gary frunció el ceño.

Gary: Ophelia, siempre te amaré

Ophelia: Tengo fe que saldrán bien de esta... Edna lo logro ustedes también

Alex: Solo cállate, obviamente tengo un plan B... - el cantinero miró a Alex- Si me adentro a un maldito prostíbulo de mala muerte en uno de los peores barrios de la ciudad a rescatar a un iluso que se enamora de una prostituta adolescente de edad indefinida con la versión ramera de la madre Teresa de Calcuta y su amiga "tom-boy" de cabello largo, es porque tengo un plan alternativo. Le dije a María que hablara con el cantinero mientras y te buscaba, en el tiempo que tardó María en sacar al cantinero pedófilo de su sitio me coloqué una simple carga de dinamita – Alex se abrió la camisa y tenía un suéter y encima 4 barras grandes y moldeadas de plastilina roja pero con la iluminación de la habitación parecía dinamita. En la parte superior de la de cada "bomba" de masilla había un pedazo soga para emular el mechero - ¿Ahora, señor cantinero, te atreverías a dispararme? – Los guardias que estaban al lado de Alex y Gary los soltaron al ver la plastilina y se echaron a correr

El cantinero apuntó

Gary: Si él te dispara todos morimos Alex, ¿Te has vuelto loco?

Alex: "Ficuas tua volunta... isofacto" - En ese momento María se tiró encima del cantinero y a este se le calló la pistola. Gary se tiró al piso y agarró el arma – Pásamela – ordenó Alex

Ophelia se quedó petrificada, Gary le dio el arma a Alex y Alex apuntó al cantinero y María para asegurarse que el cantinero no se moviera se quitó el rosario y se lo puso al cantinero al cuello, le dio una vuelta y lo comenzó a ahorcar mientras gritaba: "Siente el poder de Cristo"

Ophelia: Recuerden que 4 guardias se han escapado, deben estarle avisando a los otros, deben huir ahora

Alex: es lo más inteligente que te he escuchado hasta ahora

Gary: ¿Qué sucederá contigo? – dijo preocupado

Ophelia: Gary, En el armario hay una cuerda ábrelo y amárrame de pies y manos, me pondré boca abajo aquí en el centro y parecerá que me han forzado – Gary siguió las indicaciones de Ophelia al pie de la letra mientras luchaba por no lujuriarle las curvas de su cuerpo.

María: ¿Qué hacemos con él? – Dijo al notar que estaba algo inconsciente por el estrangulamiento - ¿Termino de estrangularlo? – dijo sacando el rosario del cuello del cantinero y acercándose a Alex

Alex le disparó dos veces, la primera bala penetró su abdomen y la segunda le dio en la cabeza

Ophelia: ¡¿Qué hiciste?! – dijo nerviosa al escuchar los disparos

Alex: un favor – dijo lacónicamente – ¡Corran!, bueno, los que pueden

Gary, María y Alex salieron corriendo del cuarto uno detrás del otro, a medida que pasaban, la gente abría paso y con más razones cuando veían a Alex con la camisa abierta. Cuando se hallaban afuera del "Club Flores" Alex buscaba el taxi que había dejado aparcado afuera del club ce fondo en las calles se escuchaba "Pull up to my bumper" y Alex se desesperaba cada vez más.

Las lecciones de vida de GaryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora