Las ganas tienen un fin.

El juego perfecto.

Luego de una intensa tarde, llena de coqueteos, JongDae llegó junto a BaekHyun al tan ansiado baño.
Una vez dentro, el chico de cabello castaño usó sus traviesas manos para masajear y apretar los glúteos del más desesperado, Baekhyun, tras este hecho escuchó el fuerte suspiro salir de esos pequeños labios, los cuales JongDae no dudó en besar, en un contacto lleno de pasión, por otro lado la linda mano de Byun bajó a acariciar la entrepierna ajena lentamente, susurrando después sobre esos labios que formaban una línea perfecta.

JongDae, ya hazme tuyo, por favor...

Casi rogó, lleno de desesperación, necesitaba al chico de ojos gatunos, no aguantaba más y aunque fuese la primera vez, a la mierda el dolor.
Así es como JongDae asintió, pero había algo que no dejaría pasar, un buen oral. Comenzando a abrir los molestos botones de su camisa de un salvaje tirón, dejando a la vista de Byun su formado abdomen, continuando después con su prenda inferior, bajando este jeans junto al bóxer de tela negra, poco a poco y lentamente hasta quitar estas y lanzarlas al suelo, esta vez BaekHyun completamente sorprendido al observar la notable y palpitante erección del chico ya desnudo, y sin pensarlo dos veces se agachó hasta quedar frente a ese erecto miembro, dejando pequeñas lamidas sobre el rosáceo glande, mientras que sus finos y largos dedos recorrían los muslos de Kim, este último perdido en el placer, jadeó.

Mierda, ahh, sigue así...

Byun al sentirse motivado por el notable placer adverso, sonrió y de una vez engulló esa erección, succionando hasta llegar a la base, tomando aire después para volver a repetir esto último, muy gustoso. JongDae no podía evitar gruñir y embestir esa pequeña boca lentamente, hasta que perdió la paciencia y ayudó a ponerse de pie al chico de allá abajo. Listo para comenzar a quitar las prendas del bello BaekHyun...